Cómo fue que Claudia Sheinbaum se convirtió en la streamer más popular de México

Fidel Castro en Cuba era célebre por sus discursos maratónicos . Su heredero político, Hugo Chávez, utilizó un programa semanal de televisión —“Aló Presidente”— como eje de su estrategia comunicacional en Venezuela. Hoy, el presidente de EE.UU., Donald Trump, aplica una fórmula de saturación mediática conocida como “inundación de la zona”.

Pocos líderes mundiales, si acaso alguno, realizan un encuentro diario de varias horas con la prensa como lo hace la presidenta de México, Claudia Sheinbaum.

Sheinbaum heredó el espectáculo de su predecesor y mentor político, Andrés Manuel López Obrador, quien lo convirtió en herramienta para conectarse con las masas y presionar incansablemente su agenda.

A un año de su mandato, la primera mujer presidenta de México ha hecho suya la mañanera.

La mañanera funciona como un programa de variedades gubernamental y le ofrece a Sheinbaum un escenario para detallar avances de su administración o corregir la narrativa. Las presentaciones oficiales suelen incluir gráficos o vídeos breves con música triunfal. Luego sigue una sesión de preguntas y respuestas con reporteros y youtubers desde el Palacio Nacional, donde la conferencia se transmite en vivo cada mañana.

Se la ve proyectar firmeza, sonrisas y mucha menos confrontación que la del carismático pero polarizador López Obrador, también conocido como Amlo. Es una apuesta por un formato que ha sabido dominar, aunque recibe críticas por ser excesivamente controladora, según encuestadores, estrategas y asesores de campaña.

"Es una receta que ha funcionado. Y por eso ella la sigue", afirmó la encuestadora Lorena Becerra.

Con Sheinbaum, la mañanera es más breve y puntual. Amlo solía llegar tarde y se extendía con monólogos históricos o largos ataques contra adversarios.

La presidenta suele dar respuestas directas en tono sereno o, en su defecto, promete que los funcionarios aportarán más información después. Ha mantenido segmentos semanales como el que orienta a consumidores contra abusos de precios, pero también sumó secciones nuevas, como la que celebra a mujeres en la historia de México. En agosto, estrenó el más reciente sencillo de la popular banda Intocable: un himno pro-migrante reproducido en video mientras ella lo escuchaba desde el podio.

Antes de asumir, sus asesores enfrentaban un desafío familiar: los grupos de estudio mostraban que el género de la futura presidenta afectaba la percepción sobre su capacidad, según una persona cercana a su equipo de comunicación.

La respuesta fue diseñar una imagen más ejecutiva, con trajes elegantes, vestidos o chaquetas bordadas con motivos tradicionales mexicanos, acompañadas de su característica coleta ordenada, explicó la fuente bajo anonimato.

En ese entonces, se especuló con que podría eliminar la mañanera. Pero, al final, la decisión fue obvia.

“Creo que es un ejercicio que no se puede soltar”, señaló Camila Martínez, jefa de comunicación nacional del partido oficialista Morena. Es una herramienta “muy poderosa” para influir en los medios, dijo, destacando cómo los grandes periódicos se han acostumbrado a recoger anuncios allí.

Martínez, que también fue vocera de la campaña presidencial de Sheinbaum, recalcó que la mañanera le permite hablarle directamente al pueblo. Además, le da margen para diferenciarse del estilo de Amlo al atacar a los críticos. “Me parece que la presidenta ha sido un poco más quirúrgica”, afirmó.

Roberto Trad, estratega político mexicano que ha asesorado a figuras como el presidente colombiano Gustavo Petro y el ministro de Finanzas brasileño Fernando Haddad, opinó que el contraste con Amlo le ha beneficiado.

"López obrador se le veía el colmillo y se le veía la intención de doler. A ella no", dijo Trad, quien nunca ha trabajado para Sheinbaum. “Aunque sigue confrontando, aunque sigue polarizando, lo hace con mucho más respeto y con mucho menos saña”.

La versión de Sheinbaum —con más de 43.000 espectadores diarios en YouTube Live en promedio durante agosto— mantiene la continuidad, pero se ha consolidado en sus propios términos.

Al mismo tiempo, hay señales de declive en la audiencia en línea, pese a su envidiable 74% de aprobación .

En los primeros nueve meses del año, los eventos transmitidos por el canal oficial de Sheinbaum —en su mayoría mañaneras— sumaron más de 24 millones de horas vistas. Eso representa casi 30% menos que las 34 millones de horas acumuladas por Amlo en el mismo periodo de 2024, según un análisis de la consultora Streams Charts.

El alcance de Amlo en YouTube Live alcanzó su cima en 2023, cuando fue coronado como “rey del streaming” en América Latina. En lo que va de 2025, Sheinbaum ocupa el puesto número 7 regional (excluyendo Brasil), detrás de creadores de contenido más jóvenes, en su mayoría gamers de Perú y Colombia, muestran los datos.

La mañanera de Sheinbaum también cambió en otro aspecto.

Cada vez menos periodistas independientes asisten para lanzar preguntas incisivas. En cambio, abundan los autodeclarados simpatizantes. Un análisis de Animal Político reveló que, en 207 conferencias entre su toma de posesión y julio, más de 500 de las casi 1.400 preguntas fueron clasificadas como favorables. Los asistentes regulares estiman que el porcentaje de cuestionamientos amistosos supera el 50%.

En esencia, la mañanera funciona como un altavoz que esquiva a las fuentes de información tradicionales, debilitadas frente al avance de las redes sociales.

La misma lógica explica por qué Trump fundó su propia plataforma, Truth Social, y dio marcha atrás con la prohibición de TikTok para, en cambio, exigir que los estadounidenses controlen sus operaciones en el país. De hecho, ha hablado abiertamente sobre el papel de esa red en su reelección.

“Vemos a muchas figuras políticas utilizando plataformas como Twitch, YouTube o incluso TikTok para conectar con votantes jóvenes y tecnológicos de formas más auténticas e inmediatas”, dijo Nazar Babenko, gerente de producto en Streams Charts.

Sheinbaum explicó recientemente el vínculo que busca establecer.

“Nos interesa que quienes escuchan desde lejos puedan entrar directamente, sin intermediarios, de lo que estamos haciendo y cómo avanzamos”, dijo. Momentos después, descalificó varias notas periodísticas como falsas y recordó que la mañanera también sirve “para exhibir la mala leche”: uno de los segmentos heredados de Amlo es el llamado “Quién es quién en las mentiras”, que apunta contra lo que el gobierno considera noticias falsas.

Ricky Arango, un consultor de campaña que ha trabajado tanto para líderes de Morena como para la oposición, señaló que Amlo enfrentó a un Trump menos agresivo en su primer mandato. Atribuye a Sheinbaum haber manejado “una relación complicadísima” con el presidente de EE.UU. evitando reacciones impulsivas y marcando agenda cada mañana.

“Me parece que es un acierto el estar mucho en los medios”, afirmó. “Le quita peso a estos temas que pueden ser de repente muy peligrosos”.

Aunque se le reconoce haber seguido con destreza los pasos de Amlo, algunos observadores sostienen que el ejercicio diario no es del todo natural para la presidenta, más inclinada a los datos y la ciencia. El mayor riesgo proviene de su fuerte concentración de poder: su coalición controla mayorías amplias en el Congreso, y la primera elección judicial de junio otorgó a su partido influencia significativa en los tribunales.

Aparte de Trump, realmente no hay quién culpar si falla.

Becerra, la encuestadora, cree que el impulso de Sheinbaum para movilizar sentimientos nacionalistas frente a Trump probablemente ya se agotó y que su altísima popularidad solo puede descender.

“Imagínate, que todo el tiempo, ocho de cada 10 mexicanos, dicen que estás haciendo bien tu trabajo”, advirtió. “En un país como México, ¡es imposible!”.