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Economistas ven un enfriamiento más rápido de los precios de los bienes, excluyendo los alimentos y la energía en el corto plazo
Bank of America Corp. es cada vez más optimista sobre la economía de Estados Unidos en 2023, lo que llevó al banco a posponer su anuncio de recesión y prever un ritmo más lento de aumentos de las tasas de interés de la Reserva Federal.
Si bien todavía anticipan una recesión leve, comenzará unos tres meses después y vendrá con una tasa de desempleo máxima más baja, dijeron economistas encabezados por Michael Gapen en una nota del 15 de enero.
Eso retrasa el comienzo a mediados de este año, mientras que la tasa de desempleo debería alcanzar un máximo de alrededor de 5,1% en el primer semestre de 2024, aproximadamente 0,4 puntos porcentuales menos que la proyección anterior.
El grupo aún anticipa una tasa de fondos federales terminal de entre 5% y 5,25%, pero llegará a ese nivel más adelante. BofA prevé que el banco central subirá las tasas en un cuarto de punto cuando se reúna en febrero, marzo y mayo, antes de pasar a los recortes y la liquidación de balances en marzo de 2024. Anteriormente, los economistas proyectaban que la Fed subiría medio punto en su reunión en dos semanas.
El panorama mejorado, aunque todavía sombrío, se debe a un mercado laboral sólido y al exceso de ahorro que ha reforzado el gasto de los consumidores a pesar de la alta inflación. Los economistas ven un enfriamiento más rápido de los precios de los bienes, excluyendo los alimentos y la energía, lo que aumenta las probabilidades de que la Fed pueda controlar la inflación sin provocar un aumento del desempleo.
“En pocas palabras, retrocedimos todo un trimestre”, dijo Gapen en una entrevista. “La misma historia general está ahí, es solo que el argumento es que el flujo de datos reciente ha sido bastante sólido, incluso dentro y alrededor del gasto del consumidor”.
Algunos consumidores verán un nuevo impulso para comenzar el año, incluyendo ajustes por el costo de vida para los beneficiarios del seguro social, así como aumentos de sueldo para funcionarios del Gobierno aprobados en el proyecto de ley de gastos de fin de año, dijo Gapen.
Si bien la caída de los precios de la energía y las condiciones financieras más favorables también han respaldado el gasto hasta ahora, BofA prevé que habrá un impulso a la tasa de ahorro a medida que avanza el año. Los consumidores también acuden cada vez más a las tarjetas de crédito para las compras.
“Es difícil argumentar que vamos a tener una recesión inmediata”, dijo Gapen. “Tomará un poco más de tiempo para que el efecto acumulativo de la política económica convierta los vientos de cola en el gasto de los hogares en vientos en contra”.
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