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El primer paso es definir un objetivo de ahorro: puede ser un viaje, una inversión, un gasto de diciembre o la compra de un bien
Con el segundo semestre del año en marcha, es buen momento para iniciar un ahorro programado que le permita enfrentar las compras de fin de año sin endeudarse. Este tipo de producto financiero le ayuda a acumular dinero de forma ordenada, con metas claras, plazos definidos y compromisos periódicos.
Un primer es definir un objetivo de ahorro: puede ser un viaje, una inversión, un gasto de diciembre o la compra de un bien. Luego, se establece el monto total requerido y se divide en cuotas mensuales, quincenales o semanales durante los próximos seis meses.
Según Henry Amorocho, profesor de Hacienda Pública en la Universidad del Rosario, “ahorrar mejora la salud financiera y permite cumplir metas a corto, mediano y largo plazo. El que ahorra, crece”. Además, advierte que este hábito protege de caer en una “economía al debe”, es decir, depender del crédito para gastos imprevistos o de temporada.
Una vez definida la meta, debe elegir una entidad financiera que ofrezca cuentas de ahorro programado. Bancos como Davivienda, Bancolombia, Banco Caja Social, Banco de Bogotá, Bancoomeva, Itaú y Confiar ofrecen productos específicos, con beneficios como tasas de interés preferenciales, asesoría financiera y cero costos de manejo.
“Lo importante es establecer montos realistas, iniciar con aportes pequeños y ser constante. Lo ideal es automatizar el ahorro y evitar los retiros anticipados, porque son el peor enemigo del ahorro”, agregó Amorocho. También recomienda monitorear el progreso y ajustar las cuotas si es posible, para alcanzar el objetivo sin afectar el presupuesto.
De forma complementaria, para quienes buscan alternativas con mayor rentabilidad, el experto sugiere explorar opciones como los CDT, cuyo retorno sigue siendo atractivo en 2025. “La inflación cerraría cerca de 4,6% y la tasa de interés rondaría 8,5%, lo que hace viable considerar estos instrumentos como una forma de ahorro-inversión”.
En resumen, tener un plan de ahorro programado le permite llegar a diciembre sin estrés financiero y, al mismo tiempo, mejorar su disciplina económica personal. Lo clave, como concluye Amorocho, es ahorrar con propósito, constancia y visión a futuro.