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Los puntos positivos, negativos y lo que está en duda en medio de la discusión de la reforma laboral presentada por el Gobierno
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La jornada nocturna, los recargos dominicales y la restricción de los contratos por prestación de servicios preocupan a los gremios
La reforma laboral trae consigo varios puntos preocupantes para los gremios de restaurantes, dentro de ellos se puede encontrar el cambio del pago de dominicales y el proceso de contratación por quienes están bajo prestación de servicios.
Según cifras de la Asociación Colombiana de la Industria Gastronómica (Acodres) la situación no ha sido buena este año, pues enero registró 25% menos ventas que el mismo mes de 2022 y febrero 31% menos, esto debido a “el aumento de precios en menús forzado por la inflación de alimentos, servicios públicos y arriendos comerciales no nos deja opción”.
Los resultados del presente año no parecen dar siquiera un esbozo de tranquilidad para este sector, por lo que una reforma laboral puede significar varios retos para la industria gastronómica en materia de presupuestos.
Una de las preocupaciones de Acodres es el aumento del pago de dominicales y festivos, pues volverían remunerarse a 100 % y no a 75 %, como ocurre hoy. La asociación de restaurantes, encabezada por Guillermo Gómez, expresó su descontento, “Si bien el recargo dominical es una compensación por trabajar en días de descanso, la sociedad aporta uno adicional que está definido por la ley, denominado propina. Los sectores de servicios nos sentimos incentivados porque el descanso de los demás nos da oportunidad de trabajo”.
Aumentar la jornada nocturna 3 horas, o subir el recargo nocturno en 25% (quedaría al 100%) y el dominical, en el contexto económico actual, afectaría la cantidad de personas formalizadas.
Encarecer aún más la nómina, que es el segundo rubro de inversión de un restaurante, va a colapsar a los establecimientos gastronómicos, con mayor impacto que la pandemia por covid-19
Acodres se muestra poco optimismo la reforma propuesta por el gobierno de Gustavo Petro, pues según dicen esta dejaría a su paso varios altos niveles de desempleo e incluso varios negocios podrían verse obligados a cerrar sus puertas.
“Encarecer aún más la nómina, que es el segundo rubro de inversión de un restaurante, va a colapsar a los establecimientos gastronómicos, con mayor impacto que la pandemia covid-19” dijo Guillermo Gómez, presidente te Acodres.
También expresó que la reforma no corresponde a las actividades ni horarios manejados actualmente. “Basta observar como, en varios países del mundo, la jornada nocturna inicia a las 10 p.m. Encarecer la operación de los establecimientos gastronómicos en contexto de inflación solo va a incentivar informalidad y a destruir empleos”.
A pesar de que según cifras de la Gran Encuesta Integrada de Hogares del Dane, el número de ocupados para enero de 2023 en el Ciiu 5630 (bares) tuvo un incremento de 20.098 ocupados frente a diciembre de 2022.
Sin embargo, estas cifras podrían verse afectadas puesto que el aumento del los salarios mínimos, el canon de arrendamiento (que aumentó entre 13,12% y 18,12%) y la inflación podrían generar graves afectaciones en las finanzas de estos establecimientos.
A lo anterior se le suman las preocupaciones de la reforma laboral, pues según lo expresó Asociación de Bares de Colombia (Asobares), el cambio de los contratos de prestación de servicios los afecta directamente pues en muchos casos son necesarios para “Dj’s en rotación, personal Logístico, bartenders o chefs invitados para shows, músicos y artistas itinerantes, empresas de alquiler de equipos entre muchas otras”. También comentan que el aumentar la jornada nocturna tres horas, subir el recargo nocturno podría afectar la cantidad de personas formalizadas, además de ser poco sostenible para los micronegocios.
“Artistas, músicos, personal de seguridad y logística, transportistas, personal de producción que se contrata externamente para fechas puntuales, podrían como está planeado, generar demandas al establecimiento por la contratación de terceras empresas especializadas para ese servicio”. Dijo Camilo Ospina, presidente de Asobares.
Jornada nocturna y contratos por prestación
Durante la pandemia por covid-19 aproximadamente 20.000 restaurantes y bares cerraron sus puertas durante el primer año de confinamiento. Ahora llega la reforma laboral propuesta por el Gobierno de Gustavo Petro, dentro de las cuales se proponen que la jornada laboral baje de 48 a 47 horas semanales, pero además, que se limiten los contratos por prestación de servicios, el aumento de la jornada nocturna y de los pagos dominicales, estas ultimas son las más preocupantes para gremios como Asobares y Acodres.
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