El hueco fiscal en pensiones ascendió a $38 billones este año

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Es urgente atacar el problema de las pensiones en Colombia. Y en la última asamblea de la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (Anif), Miguel Largacha, presidente de Porvenir, dijo que “siempre hemos dicho que Colombia tiene una baja cobertura y se necesita una reforma que sea equitativa. No puede ser que todas las pensiones que da Colpensiones, o el régimen de reparto, tengan subsidios; pero como ha dicho Anif, son a lo Hood Robin, se le quita a los que más necesitan para darle a los que más tienen. Lo tercero es que tiene que ser sostenible”.

Pero ese no es el único inconveniente. Cambios como aumentar la edad de jubilación, incrementar los aportes o disminuir los beneficios al sistema de pensiones han tenido el objetivo de reducir el déficit que el régimen causa en las finanzas públicas; sin embargo, el hueco aún continúa.

Para este año, las cifras de la Asociación Colombiana de Administradoras de Fondos de Pensiones y de Cesantías (Asofondos) indicaron que el déficit es de $38 billones, cifra que es casi tres veces lo que costará el Metro de Bogotá ($12,9 billones). Este problema que tiene el Gobierno Nacional existe desde 2004, cuando las reservas del sistema público se agotaron y entró a funcionar a pérdidas.

Esta situación generó un problema adicional y es que los aportes de los colombianos no se están ahorrando, sino que están siendo usados para pagar las pensiones y las diferencias se están cubriendo con el presupuesto general. La cifra establecida en el Presupuesto General de la Nación de 2017 ($38 billones) dedicada a este rubro representa 4% del PIB o 30% de los ingresos del Gobierno Nacional.

Por esta razón, los analistas y los gremios han declarado que el déficit cada vez es más complejo de manejar. Además, hay un consenso para hacer una reforma pensional lo más pronto posible, con un objetivo claro: sanar las finanzas del Estado.

Santiago Montenegro, presidente de Asofondos, dijo en el último congreso del gremio que “hay argumentos de fondo para hacer una reforma pensional de prima media y algo que debemos añadir son los problemas fiscales, el hueco pensional está consumiendo una tercera parte de los recaudos tributarios del Gobierno”.

Y es que en caso de que el panorama actual siga su curso, es decir, sin reforma, el valor presente neto pensional del país será 114% del PIB de este año, según Anif, descontados los flujos del horizonte entre 2017-2050. La cifra refleja los elevados subsidios del sistema de Colpensiones, “aún bajo un horizonte fiscalmente conservador en el cual la cobertura pensional se mantiene tan baja como en el 30% actual, cifra muy inferior al 64% de cobertura que se observa en promedio en América Latina”.

Leonardo Villar, director de Fedesarrollo, dijo que “una reforma pensional es prioritaria, fundamentalmente porque en Colombia estamos gastando 4% del PIB, es decir, más de 25% de los ingresos del Gobierno en pago de pensiones que llegan a poco más de 20% de las personas mayores del país. A futuro ese porcentaje de adultos sube”.

Roberto Junguito, exministro de Hacienda, comentó que “la reforma pensional es algo necesario. Sería muy importante avanzar en un acuerdo entre el sector privado, Asofondos, Anif, el Gobierno y los sindicatos para poder llegar a tener una propuesta pensional para el próximo presidente”.

El exministro agregó que “algunas propuestas para modificar el sistema y lograr reducir el déficit es hacer cambios en las edades, en las propias contribuciones, hay que mirar cómo se reducen costos como los subsidios de las personas de más altos ingresos de Colpensiones”.

Tanto Anif como Fedesarrollo han coincidido en diferentes foros en que esta situación representa una bomba social. “Los pagos pensionales a cargo del fisco estarían descendiendo de sus niveles actuales del 4,1% del PIB hacia el 1,1% del PIB en 2050.

Esto se explica por la baja cobertura pensional de solo el 30%, lo cual representará todo un drama social, ya que la población mayor de 60 años se habrá prácticamente triplicado (pasando de 5,5 millones a 15 millones hacia 2050)”, resaltó en un documento de trabajo Anif.

En esto coincide la academia. Carlos Sepúlveda, decano de la facultad de Economía de la Universidad del Rosario, dijo que “los pensionados representan un porcentaje alto del gasto público (...) no estamos logrando un sistema sostenible que garantice la pensión a los protegidos; es una bomba de tiempo que está a punto de explotar”.

Sin embargo, si algo rescatan los expertos es que en la historia del sistema pensional, con la Ley 100 de 1993 el costo de estas a cargo del Estado se redujo a 162%. En ausencia de esta Ley hubiera sido de 292,3%, detalló Asofondos.