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La creciente tensión entre Rusia y los países de occidente por una posible invasión a Ucrania tiene en vilo al mercado energético, especialmente del petróleo y el gas
La ministra de Exteriores, Annalena Baerbock, dijo que Rusia está destruyendo las rutas y almacenamiento del grano ucraniano
La ministra de Relaciones Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, acusó a Rusia de provocar deliberadamente una crisis alimentaria mundial para tratar de debilitar la alianza internacional en su guerra en Ucrania.
Rusia está destruyendo las rutas de transporte y las instalaciones de almacenamiento del grano ucraniano, lo que está elevando los precios y amenaza con desatar un "hambre brutal" en todo el mundo, especialmente en África, dijo Baerbock en una conferencia de prensa después de conversaciones con sus homólogos del Grupo de los Siete en el norte de Alemania.
Ucrania es uno de los mayores productores de trigo del mundo y EE.UU. espera que la producción caiga un tercio este año en comparación con la temporada pasada.
Baerbock agregó que alrededor de 25 millones de toneladas de granos están atrapadas en los puertos de Ucrania, particularmente en Odesa, debido al bloqueo ruso y solo una pequeña cantidad puede transportarse por tren.
“No debemos ser ingenuos al respecto”, dijo Baerbock. “No son daños colaterales, es un instrumento perfectamente deliberado en una guerra híbrida que se está librando actualmente”.
Baerbock también condenó lo que llamó la “campaña de desinformación masiva” de Moscú que, dijo, buscaba “retratar al agresor como la víctima”.
Esta semana, India se unió a otras naciones para prohibir las exportaciones de trigo ante las limitaciones de suministro global provocadas por la guerra en Ucrania.
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Rusia suministra aproximadamente la mitad del carbón térmico del continente, que se utiliza para alimentar sus centrales eléctricas y generar electricidad.
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