BMW actualiza el C 650 Sport y renueva la apuesta por sus escúteres

Ambos modelos llegan con cambios comunes como pero los de más enjundia los asume el deportivo, el C 650 Sport, que ve muy mejorada su estética, aunque el C 650 GT también cuenta con alguna. 

Nuevo CVT

El propulsor de ambos modelos es un bicilíndrico en línea de 647cc que desarrolla unos sobresalientes 60CV de potencia nominal junto con un par motor máximo de 63Nm a 6.000 rpm aunque puede subir por encima de las 8.500rpm. Los dos modelos tienen la posibilidad de una variante de potencia reducida de 48CV que conserva una buena cifra de par, 54Nm a 4.250rpm.

Pero la novedad técnica más importante llega, en este caso para los dos modelos, en la transmisión variable continua. Gracias al nuevo reglaje de la caja CVT y al embrague optimizado la respuesta al puño es mucho más rápida, la salida, por ejemplo, en un semáforo ya no es necesario subirla de revoluciones y el margen ese que se nota desde el primer giro de puño hasta notar la tracción se ha reducido mucho. 

Da la casualidad que estas mejoras, reconocido por la propia marca, ha sido una las demandas principales de los clientes.

Rematando el conjunto propulsor, el nuevo sistema de escape (que cumple con la Euro4 de emisiones) sigue siendo de acero inoxidable y aunque no llevan silencioso primario, solo el principal, su sonido también ha sido ‘mejorado’, ahora es más ronco, más profundo. 

En el caso del GT, es más corto y sencillo, mientras que el del Sport es más agresivo y pronunciado en su ángulo.