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Las ventas de vivienda vienen cayendo desde mayo de 2022, cuando llegaron a un nivel máximo de 272.000 unidades anuales
Bbva Research en Colombia realizó un estudio sobre la situación inmobiliaria en el país, según este, el sector de la construcción enfrentará grandes desafíos este año, con lo cual proyectan que la venta anual de vivienda nueva caerá por debajo de las 200.000 unidades. Esta actividad representa 13,5% del PIB nacional y genera cerca de 1,7 millones de empleos.
Mauricio Hernández, economista de Bbva Research para Colombia, explicó que se viene dando una menor demanda por vivienda y una reducción mayor de la oferta. "Los datos reflejan un comportamiento de desaceleración del sector inmobiliario, pues se viene dando una menor demanda por vivienda y una reducción incluso más profunda en la oferta. Esta dinámica ha ayudado a equilibrar el mercado, pues evitó que las constructoras acumularan excesivos inventarios, algo que sí había sucedido en el año 2016, cuando el menor precio del petróleo redujo la compra de vivienda y se siguió construyendo a un nivel elevado", dijo.
La proyección es que la adquisición anual de vivienda nueva puede seguir cayendo por debajo de las 200.000 unidades, aún con una alta participación de la vivienda de interés social (VIS), la cual representa 71% de las ventas de la vivienda nueva.
Respecto al sector no residencial, también cabe resaltar que está presentando una desaceleración económica. La oferta de oficinas y locales comerciales venía reduciéndose a buen ritmo desde 2021, pero desde finales de 2022 se empezaron a ralentizar las ventas de este tipo de construcciones.
En ese sentido, según Hernández, es posible que hasta 2024 y 2025 aumente nuevamente la oferta de oficinas y locales comerciales. Las construcciones de bodegas, en cambio, siguen teniendo buena demanda por la reactivación que ha tenido la industria manufacturera y el comercio exterior del país.
Este panorama evidencia la disminución de las ventas de vivienda, las cuales vienen cayendo progresivamente desde mayo de 2022, cuando llegaron a un punto máximo de 272.000 unidades anuales. En la actualidad, la comercialización de este tipo de bienes inmuebles se ubica en 241.000 unidades al año.
Para superar el momento de desaceleración económica en el sector, se debe entender que la reducción de la oferta, incluso por debajo de la demanda, es una manera de evitar que se incrementen los niveles de inventarios. Como parte de las medidas para dinamizar la venta, los precios de las edificaciones residenciales crecieron menos que la inflación de 2022, conteniendo los temores de una sobrevaloración inmobiliaria que podría afectar de manera directa al sector.
Los arriendos crecieron 3,7% en 2022, en el panorama actual pueden acelerarse. Se proyecta que los subsidios del Gobierno se estabilizarán en número, pero se prevé que tomen más relevancia las ayudas públicas hacia la vivienda en municipios y ruralidades más pobres.
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