Promotor de Friogan pidió a la Superintendencia liquidar la firma

La decisión se conoció en un documento al cual tuvo acceso LR en el que Muñoz informó a Nicolás Polanía Tello, quien es el superintendente delegado para Procedimientos de Insolvencia, que “con todo respeto solicito a su Despacho, que proceda a decretar la Liquidación Judicial de Friogan S.A. hasta hoy en reorganización”.

Este dictamen se tomó luego de que el promotor argumentara que “al vencimiento del plazo señalado para radicar un Acuerdo de Acreedores respecto de la sociedad de la referencia, le informo que no hubo Acuerdo que presentar en esa Superintendencia”.

Lo que pudo establecer este diario es que al no contar con el apoyo de Muñoz, los administradores de Friogan intentaron buscar diferentes ayudas para lograr una extensión en la presentación de acuerdos, sin embargo la mayoría de los acreedores y socios no dieron el aval, ya que se habían presentado tres prorrogas en los últimos meses. 

Armando José Daza, presidente de Friogan, salió al paso de la sentencia que hizo Muñoz, y dijo que “la empresa (Friogan) presentó directamente ante la Superintendencia de Sociedades el acuerdo de Reorganización en el marco de la Ley 1116 de 2006, ante la ausencia del liquidador del Fondo Nacional del Ganado (FNG), Pablo Muñoz, quien había condicionado el voto positivo del Fondo a la certificación de disponibilidad de los recursos en un patrimonio autónomo por cuenta de un nuevo inversionista”. 

Sin embargo, otra versión tendrían los acreedores y el promotor, quienes no habrían aceptado el acuerdo por la falta de garantías que presentaba el nuevo inversionista, Pedro María Moreno, y la falta de una propuesta seria que cumpliera todos los indicadores requeridos para una negociación que requería un capital de $71.500 millones para pagar la deuda.

Mauricio Tobón, director del Instituto para el Desarrollo de Antioquia (Idea) uno de los principales acreedores dijo que “hicimos todos los esfuerzos necesarios para evitar la liquidación como socios y acreedores, pero las cosas no se dieron”.

La liquidación, que quedará en manos de la Superintendencia de Sociedades, solo será la última parte de la historia de Friogan, que desde que surgió en 2006, siempre manejó deudas ante diferentes entidades bancarias y territoriales, que en estos momentos ascienden a $71.500 millones.

De este monto, cerca de  $40.000 millones serían las deudas con algunos bancos como el Banco de Bogotá ($450 millones); Banco de Occidente ($19.990 millones); Bancolombia ($4.902 millones); Bbva ($3.278 millones); y Colpatria ($7.793 millones).

Además, se tiene que sumar otras deudas con el Idea que superaban $20.000 millones.

Estas deudas hicieron que la entidad entrará en reorganización desde el 6 de agosto de 2015, cuando la Superintendencia informó en un comunicado que el proceso de reorganización pretendía, a través de un acuerdo, “preservar empresas viables y normalizar sus relaciones comerciales y crediticias, mediante su reestructuración operacional, administrativa y de sus pasivos”.

Ante este proceso, la última carta que se jugaron los administradores de Friogan fue presentar al ganadero Moreno, quien esperaba capitalizar a la compañía con $100.000 millones ($80.000 millones para pagar las deudas y $20.000 millones para modernizar la firma), sin embargo, ante las dudas que generó Moreno no se otorgó la capitalización.

Después de diez meses de proceso lo que viene para Friogan es que la Superintendencia acepte la recomendación de Muñoz, liquidando a la empresa que tiene en su poder cinco frigoríficos y 750 empleados en su poder.

La opinión

Mauricio Tobón
Director del Idea
“Como socios y acreedores de Friogan hicimos todo lo posible para salvar la compañía, pero no se pudo ante la falta de acuerdos con la administración”.