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Franco indicó que "los efectos que se van a presentar son, básicamente, la disminución en la precipitación, aumento de la temperatura y aumento en los rayos ultravioleta, por tener menos nubosidad. Después de eso, vienen los impactos y es que al tener menos lluvias, habrá bajo caudal en los ríos y en los embalses, además de un incremento en la cantidad de incendios forestales".
El Funcionario señaló que podrían presentarse dificultades en el embalse de Salvajina y en el cauce del río Cauca y sus fuentes abastecedoras. Actualmente, la represa de Alto Anchicayá está en un 44% de su capacidad y debería estar al 70%.
"El acueducto de Cali se beneficia del río Cauca (75% de la ciudad) y si tenemos una disminución del caudal, potencialmente, podríamos tener la posibilidad de que Cali tenga dificultades en el suministro y abastecimiento de este recurso", aseguró Franco.
Según lo informado por el director del Ideam, este fenómeno tendría una duración de un año, con diferentes impactos que dependen del estado de sus fases.
"El Fenómeno del Niño tiene cuatro ciclos y cada uno dura tres meses. La fase de inicio, que es julio, agosto y septiembre. Fase de desarrollo, que es de octubre, noviembre y diciembre. La fase de madurez, que es la de mayor impacto del fenómeno, que es durante el primer trimestre del 2015; y la fase de debilitamiento, que está programada para los meses de abril, mayo y junio", aclaró.
Históricamente, los últimos tres meses de este año se presentan más lluvias en Colombia. Ante esto, el director del Ideam anunció que "esas lluvias tendrán menos intensidad y eso nos debe preparar para la fase de madurez, que es la época más seca del año, cuando traeremos un rezago de cinco meses sin precipitaciones intensas y con la posibilidad de que los ríos tengan una disminución importante".
Asimismo, el funcionario aseguró que las jornadas de concientización que se adelantan en todo el territorio nacional, solo ubican a su entidad como una fuente de información de alerta temprana del fenómeno.
"El Ideam no opera ni hace planes de contingencia, sino que entrega la información de línea científica para que los alcaldes y gobernadores implementen sus planes de acción. Ellos deben identificar y monitorear las condiciones de los sitios críticos, operar la contingencia (mirar qué pasa con el suministro de agua y buscar fuentes alternativas)", sentenció.
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