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Con una variación de -17,9% y -17,5%, respectivamente las capitales de Nariño y Atlántico destacan por los resultados en reducción de la brecha entre ricos y pobres casi duplicando el promedio nacional (-9,4%), mientras ciudades como Bucaramanga, Cúcuta y Bogotá se ubican por debajo del cálculo total del país.
El economista y docente de las universidades Javeriana y Politécnico Grancolombiano Alejandro Espitia explicó que la reducción de la pobreza se atribuye a dos componentes: el crecimiento económico vía mercado y las políticas públicas que pueden ser tanto asistencialistas como integrales.
“Con solo crecimiento económico seguramente no se va a sacar a la gente de la pobreza, ni siquiera con la creación de más empleo, pero solo con políticas publicas tampoco se alcanza dicho resultado, de hecho, sería insostenible”, explicó el académico.
El más reciente informe del Dane reveló que el año pasado la cantidad de personas en situación de pobreza disminuyó 0,7 puntos porcentuales pasando de 28,5% en 2014 a 27,8%. Cuando se extiende dicho análisis a principios de década se tiene un salto en la incidencia de 37,2% a 27,8% que es especialmente más alto en los centros poblados rurales dispersos (40,3%).
Lo anterior se traduce en que 3,42 millones de personas en todo el país han alcanzado un mayor ingreso en los últimos cinco años (por encima de $894.552), especialmente en las cabeceras municipales (2,51 millones).
Al respecto el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, destacó que las mencionadas cifras hablan muy bien del país y su economía: “esta reducción en la pobreza demuestra que la estrategia de Austeridad Inteligente está funcionando. Y lo más importante, significa que el país puede acomodarse exitosamente al nuevo escenario. Nos debe llenar de confianza y optimismo saber que vamos por el camino correcto”, enfatizó con relación a la difícil situación por la caída en los precios del petróleo y el ajuste en las cuentas.
En términos de pobreza monetaria extrema la variación no es tan marcada pero en todos los casos (excepto Bucaramanga) se evidencia una reducción. De nuevo aquí Pasto y Barranquilla se ubican en los primeros lugares con disminuciones de -7,5% y -5% cuando el alcance a nivel nacional es de -4,4% y con el bajo desempeño de ciudades como Ibagué, Pereira y Villavicencio (todas muestran una variación de -1,7%).
Al respecto Espitia manifestó que en el caso de Nariño el departamento se ha posicionado como un referente en materia de administración pública por los buenos manejos y los marcados logros de sus gobiernos. “Han impulsado políticas exitosas para ayudar a las personas a salir de la pobreza convirtiéndose en un ejemplo particular con sus programas”.
También indicó que dado el potencial de la región en sí misma tienen ventajas que las ayudan a cerrar esas brechas frente a las grandes ciudades.
Por su parte, respecto a Barranquilla el gerente de Desarrollo de Ciudad, Jaime Pumarejo, destacó que se han enfocado en fortalecer la institucionalidad para poder hacer inversión social. “El objetivo de los últimos ochos años, en palabras del alcalde, es luchar contra la indiferencia para tener más crecimiento económico”.
De esa forma el presupuesto pasó de $600.000 millones a $2,2 billones sin aumentar en gastos de funcionamiento sino priorizando la inversión social. “Estamos redistribuyendo mucho más esos recursos y llegando a la base con calidad en la educación y un modelo de salud que es referencia nacional con la idea de crear las mismas oportunidades para todos y mejorar su calidad de vida”, dijo.
El Gobierno Nacional destacó, tras la publicación de las cifras, que es la primera vez que la clase media consolidada (30,5%) representa mayor población que la clase baja (27,8%), pues cuando comenzaron estas mediciones en 2002 los pobres eran 42,7% del país.
La clave, de acuerdo con los analistas, es mejorar las condiciones de las personas de manera que puedan superar su situación y dinamizar la movilidad, pero cuidando a quienes tienen una alta probabilidad (10%) de volver a caer en la pobreza.
Trabajo informal continúa siendo la mayor dificultad
De acuerdo con el informe del Dane en términos de pobreza multidimensional el Índice pasó de 21,9% a 20,2%, siendo especialmente importante la reducción en la región Atlántica (de 34,6% en 2014 a 31,2% en 2015). Sin embargo, cuando se mira por variables se tiene que la mayor privación de los hogares es por cuenta del trabajo informal, que aunque cayó 2,3 puntos porcentuales se ubica en 74,5% de los hogares. También destaca el bajo logro educativo (48,2%).
Las opiniones
Jaime Pumarejo
Gerente de Desarrollo de Ciudad en Barranquilla
“Lo más importante es que haya confianza en la ciudad para que lleguen nuevas empresas a invertir y crezca la economía”.
Alejandro Espitia
Economista y docente universitario
“En algunas ciudades como Bogotá la reducción es menor porque ya van adelantadas en este propósito que cada vez se hace más complicado”.
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