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Según el Ideam, las lluvias se reducirán en 50% para mitad de año. Para el tercer trimestre, regiones Andina y Caribe tendrán precipitaciones entre 10% y 40%
El fenómeno de El Niño, que según datos del Ideam podría ocurrir con probabilidades entre 51% y 64% entre mayo - julio y octubre - diciembre, no solo traerá consecuencias como altas temperaturas, incendios forestales y sequías, sino que también podría afectar fuertemente la producción de alimentos.
Este fenómeno, que se presenta cada tres o siete años, podría provocar pérdidas en los cultivos de arroz, café, banano, cítricos, mora, hortalizas, aguacate y otras frutas, siembras que se dan en su mayoría en las regiones Andina y Caribe. Según el Ideam, para el trimestre de junio a agosto estos departamentos tendrán precipitaciones por debajo de los promedios históricos, entre 10% y 40%.
De esta forma, El Niño que amenaza con reducir los volúmenes de agua en cierta parte del país, también afectaría al sector ganadero, ya que la ausencia del líquido y las altas temperaturas suelen desencadenar el desarrollo de plagas y enfermedades vacunas. Según datos de Fedegan, durante el fenómeno de El Niño presentado en 2018 murieron 38.803 animales y más de 409.502 fueron desplazados por las sequías. “Los agricultores y el país en general deben prepararse para la probable disminución en las lluvias asociadas con el aporte del fenómeno El Niño. Debemos prepararnos para sequías y para el incremento en la ocurrencia de incendios asociados con condiciones secas”, explicó Luis Alfonso López, jefe del Servicio de Pronósticos y Alertas del Ideam.
Y es que, en la región Andina, por ejemplo, que según el Ideam presentará un descenso de lluvias entre 10% y 50% para julio, se destaca la producción de café, frutas (guayaba, guanábana, moras, piña, naranjas, toronjas, etc.) y hortalizas de piso alto como ajo, zanahoria, coliflor, repollo, lechuga y remolacha, mismas que años atrás, cuando se presentó El Niño, tuvieron más de 5.000 hectáreas afectadas. Igual caso para la región Caribe, que se caracteriza por cultivar maíz, arroz, plátano y tubérculos y cuya probabilidad de que se reduzcan las lluvias para mitad de este año está entre 10% y 40%.
Otros departamentos como Quindío, Caldas y Nariño, cuyos fuertes son los cultivos de plátano, cítricos, mora, aguacate y hortalizas, tuvieron daños en más de 30.000 hectáreas en 2018, fecha en la que se presentó el ultimo fenómeno de El Niño en Colombia y en la que, según datos de Asohofrucol, se estima que por lo menos siete departamentos tuvieron afectaciones en los diferentes cultivos de frutas, hortalizas y aromáticas, como consecuencia del verano.
Estas sequías, que terminan afectado la producción de los alimentos básicos de la canasta familiar, son difíciles de controlar, pero al ser un evento que desde ya se predice, la recomendación de las diferentes entidades del agro colombiano, así como del Ideam, son emplear protocolos que suplan la falta de agua y ayuden a mitigar el impacto de la sequía en las zonas que se conocen serán las más afectadas.
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