“El Gobierno Nacional destina aproximadamente $5 billones en subsidios de energía”

El sector energético del país enfrenta varios retos que según los expertos deberían ser contrarrestados con políticas públicas que generen alivios, no solo a las empresas generadoras de energía, sino también a las instituciones estatales.

Previo a la edición número 12° del congreso de Andeg, su presidente ejecutivo, Alejandro Castañeda, dijo que el Gobierno debe tomar medidas para evitar que los subsidios de tarifas en estratos uno, dos, y tres le generen mayores presiones fiscales al Estado, además que no deberían dejar de lado el problema de Air-e, que de complicarse, podría generar un apagón a nivel nacional.

¿Cómo ve el panorama actual de los subsidios?

El monto de subsidios que debe tener la Nación se encierra entre los aportes de los gremios distintos para cubrir lo que se otorga en subsidios a los estratos uno, dos y tres, y que realmente está desfinanciado.

Esto viene creciendo año a año, porque cada vez hay más gente que se subsidia en esos estratos y algunos de esos recursos llegan a personas que no deberían recibir subsidios o que están mal catalogados. Más o menos la necesidad desde el punto de vista de recursos fiscales para esos subsidios está del orden de $5 billones hoy en día Si no se hace nada en ese frente, pues esa bola va a seguir creciendo hasta que con el paso de los años fiscalmente va a presionar

¿Cuál es el problema que tienen estos subsidios?

A pesar de la gran inversión, le está llegando mucha plata a la gente que realmente no necesita subsidios y que los ingresos no los hacen beneficiarios de estas ayudas. Ese es el principal problema. Entonces, desde hace varios años, lo que se ha venido haciendo es medir qué tanta capacidad de ingreso tiene la gente en cada uno de esos niveles, con herramientas como el Sisbén para evitar esto.

¿Cuáles son los retos que está pasando el sistema energético?

El sector tiene un problema muy grande en el corto plazo y es la situación de cada una de las empresas, y no solamente por el tema de subsidios. En el corto plazo lo que se debería hacer este es ponerse al día con Air-e, porque si no el sector, muy posiblemente en el primer semestre del próximo año, no aguante el ritmo en el cual las deudas vienen creciendo y que ya llegan a $1,4 billones de los cuales $900.000 millones son con las empresas térmicas, $300.000 millones con las hidráulicas y otros $200.000 millones con la transmisión del país.

El otro reto importante es que no estamos siendo capaces de ir creciendo al ritmo de la demanda. Ahí es donde el Gobierno debe hacer una subasta para expandir e invitar a todos los inversionistas a expandir la capacidad de generación.

¿Qué otros factores deberían estar entre las prioridades del Gobierno Nacional?

Ponerse al día en las deudas que tienen las empresas para que no se reviente la cadena, y hay que buscar como expandir la capacidad de generación para cumplir con la demanda.

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En el medio de eso está el hecho de revisar el cargo por confiabilidad, pero la invitación que le hemos hecho al ministro de minas y energía es que en lugar de desgastarnos con un proyecto de ley, más bien trabajemos desde el punto de vista regulatorio, ya que la regulación no es lo suficientemente flexible hoy en día para poder hacer lo que se necesita, desde el punto de vista de mejoramiento en tarifas.

Hemos dicho es que estamos abiertos a revisar, pero en un escenario regulatorio. Todos estos mecanismos son regulatorios, el cargo por confiabilidad, en su momento el cargo por capacidad, no se crearon desde la ley.