Ecopetrol negó nuevos afloramientos de crudo en el pozo La Lizama

Luego de 26 días desde que el pozo Lizama 158, ubicado en La Fortuna, corregimiento de Barrancabermeja, (Santander) tuvo un afloramiento, en la zona se mantienen los sistemas de monitoreo y continúan las medidas de contingencia, que han implicado el desplazamiento de personas y el rescate de animales. Igualmente, las autoridades han hecho presencia en la zona para investigar y determinar qué originó el derrame y la responsabilidad de Ecopetrol.

En el amanecer del martes, habitantes del corregimiento denunciaron que en las cercanías del afloramiento del pozo se presentaron dos nuevos fluidos de crudo tras un par de explosiones que se escucharon en la noche.

Sin embargo, la petrolera respondió, por medio de un comunicado, que desde el martes se observa un orificio adicional, a unos 60 centímetros de distancia de la abertura inicial, que hace parte del mismo afloramiento, el cual fue controlado desde el pasado 15 de marzo. Se estima que se derramaron 550 barriles, los cuales se mezclaron con lodo y agua lluvia.

Igualmente, Ecopetrol reiteró que “el afloramiento continúa en el proceso de disminución de la presión y a la fecha se confirma que el nivel de los fluidos contenidos en el lugar siguen disminuyendo". Así mismo, la petrolera señaló que líquido está atrapado y no hay riesgo de que se desborde y contamine las fuentes hídricas.

Por otro lado, a las medidas de control se suma el equipo snubbing unit, el cual es utilizado para intervenir pozos en condiciones de alta presión. Con este equipo se taponará el pozo de forma definitiva.

Así como se ha llevado a cabo el plan de contingencia, se han iniciado diferentes investigaciones para esclarecer lo sucedido.

“Hemos ordenado una investigación interna con personal externo, independiente a la operación, para que nos permita entender qué pasó, por qué sucedió lo que sucedió y, sobre todo, evitar que cosas como estas se repitan en adelante”, mencionó Felipe Bayón, presidente de Ecopetrol.

Por su parte, el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Luis Gilberto Murillo, solicitó formalmente a la Fiscalía General de la Nación y a la Procuraduría General de la República que apoyen la investigación que debe adelantar la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla). A ambas entidades les pidió que adelanten investigaciones para identificar y acusar a los responsables de la tragedia.

Además, señaló que Ecopetrol y la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) conocían de fallas en el revestimiento del pozo y de sus problemas mecánicos, pero no notificaron a las autoridades ambientales.

Vale la pena mencionar que para determinar responsabilidades, primero se deberá conocer qué causó el accidente.

Por otro lado, en el país ya se han empezado a desarrollar manifestaciones en contra del desastre ambiental. En Bogotá, frente a la sede del Ministerio de Ambiente, se convocó un plantón para exigir que el estado resuelva la emergencia con mayor rapidez y penalice a los responsables.

Movilización a través de las redes sociales
La situación ambiental en el corregimiento rural de Barrancabermeja ha generado indignación y movilización por medio de las redes sociales. A través de la plataforma Avaaz se han creado peticiones para que el Gobierno acelere su gestión en la resolución de este problema. Así mismo, por medio de Twitter se ha hecho tendencia un hashtag en el que se le pide al ministro Murillo que renuncie. Sin embargo, él no es el único funcionario al que se le ha pedido que deje su cargo, pues organizaciones ambientales también se lo demandan a la directora de la Anla, al presidente de la ANH y al MinMinas.