A pocas horas de que el presidente de la República Juan Manuel Santos entregue las empresas municipales a los caleños, el contralor general de Cali, Gilberto Hernán Zapata, envió al alcalde de Cali, Rodrigo Guerrero, un pronunciamiento que refiere a la situación fiscal real de la entidad y como organismo de control solicitó la adopción de medidas necesarias para conservar la prestación de los servios públicos de la ciudad.
En primer lugar, Emcali no efectúa avalúos técnicos de sus bienes desde el año 2006, segundo, en los estados financieros no se había incluido el concepto de activos intangibles, lo que no le permitirá valorar el Good Hill de la empresa y esto ha generado ventajas competitivas, frente a otras entidades públicas y privadas, tercero, la empresa presenta baja ejecución en el concepto de inversión y no cumplió con el plan estratégico 2008-2012, específicamente en la unidad de negocio de Telecomunicaciones, también se descubrió que no se ejecutaron oportunamente los recursos para la inversión en tecnología, considerando así, que la plataforma tecnológica no es oportuna, integral y de buena calidad, además que no maneja una política de seguridad de la información, lo que genera un riesgo.
Por otra parte, el índice de agua no contabilizada a diciembre de 31 de 2012 de acueducto es del 51% y la meta establecida en el indicador para vigencia 2012 era de 39%, asimismo, la empresa no cuenta con fuentes de agua alternativas para garantizar el suministro interrumpido de agua potable, en energía, la perdida no técnica durante la vigencia de 2012 presenta una evolución promedio del 13,16% y de acuerdo con la normatividad debe ser de 13%.
El contralor mencionó el indicador de endeudamiento total, que mide la proporción de los activos que están financiados por terceros, el cual se incrementó 6 puntos porcentuales al pasar de 45% en 1999 a 51,26% en la vigencia de 2012, la cancelación de la deuda de $1 billón con la Nación genera una preocupación respecto al flujo de caja de la entidad.
Se observó igualmente que la cartera se ha incrementado por deficiencias en la gestión de cobro y la no aplicación de políticas de previsión, respecto al concepto de vigencias futuras por normatividad contable, no se incluye como pasivo pero si representa obligación de pago y el valor por cancelar en el periodo de 2013-2015 asciende a $1,3 billones.
Finalmente, se detectó que Emcali no concilia la información de los procesos jurídicos presentados por la dirección Jurídica y contable, por tal razón, no fue posible determinar el valor real de los procesos judiciales.