Continuidad de Rafael Mejía en la SAC en veremos tras agarrón con Juan Manuel Santos

Peor no le pueden haber salido las cosas al presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), Rafael Mejía, luego de que se arruinara ayer un almuerzo en la Casa de Nariño en el que participaban la junta directiva del gremio, el Presidente de la República, y los ministros de Hacienda, Agricultura y Comercio Exterior, entre otros.

Todo fue cordial al comienzo hasta que el presidente Santos les dijo a sus comensales que él merecía respeto y que no se le podía tildar de ‘tramposo’, haciendo alusión a las palabras de Mejía en la prensa nacional, cuando manifestó que “el Gobierno fue tramposo, no fue transparente. Se había comprometido a mantener la protección para el sector agropecuario y la quitó. Los sectores del arroz, la leche, el aceite, el maíz y el azúcar quedaron expuestos, sin protección alguna”, al referirse a las negociaciones con la Alianza del Pacífico.

Mejía pidió la palabra, pero Santos le dijo que solo se la daría si era para pedirle disculpas por lo dicho. La tensión llegó al punto que el Presidente se retiró de la sala y los gremios del campo tuvieron que abandonarla también, no sin antes hacer un pacto de confidencialidad de que no le contarían lo sucedido a los medios de comunicación, pues la situación puso en evidencia que había grandes grietas entre los gremios.

En la sala asociaciones como Asocaña, que preside la junta directiva y Asocolflores, manifestaron no estar de acuerdo con las palabras de Mejía hacia el Presidente.

Al término de la reunión, pasado el medio día, salieron del recinto uno a uno los representantes de los diferentes sectores, pero aseguraron a los medios de comunicación que preferían que hablara el presidente de la SAC.

Sin embargo, Mejía afirmó que no entregarían declaraciones, aunque ante la presión de los periodistas cedió a contestar superficialmente algunas de las preguntas.

“Santos dio explicaciones a temas como las inversiones del Estado, los subsidios directos, el pacto agrario, el subdesarrollo, los precios bajos, los altos costos de producción, la revaluación, el contrabando y el aprovechamiento de los TLC”, dijo cuando se le preguntó sobre qué se había discutido.

No obstante, el presidente de la SAC no se refirió a su enfrentamiento con el Primer Mandatario y sus diferencias con los empresarios del sector. Pero sí indicó que convocaría una reunión extraordinaria de la Sociedad “para ver cómo vamos a funcionar de ahora en adelante y si se justifica seguir haciendo los gremios regionales o se va a manejar transversalmente ciertos puntos y ya individualmente a través de los gremios con el Ministerio”.

El ministro de Agricultura, Rubén Darío Lizarralde, por su parte, dijo que la jornada “no fue fácil” y que se llegó a la conclusión de trabajar en equipo.

“Vamos a ser más completos y establecer objetivos específicos para hacer seguimiento a cada uno de los puntos que le preocupa a los sectores”, indicó.

Tal como lo dijo Mejía, los gremios se reunieron luego a las tres de la tarde en medio de un comité de crisis, pero la suerte ya está echada, y según fuentes internas de la reunión, la salida de Mejía del gremio es una alternativa que se tocará en la junta, pues se ha convertido en una piedra en el zapato para sus colegas del campo.

Mejía es un exitoso empresario ganadero que produce leche en Cundinamarca y cuenta con intereses en el cultivo de arroz en Tolima, pero no es la primera vez que se enfrenta con otras organizaciones, ya lo había hecho con Fedegán (que no está en la SAC), Asocaña y hasta Fedepalma, su gran aliado en la junta.

Mejía es bisnieto de Alfonso López Pumarejo y oficia como presidente del Consejo Gremial. Curiosamente, había sido cercano a Santos en los comienzos del proceso de paz, pero su postura tuvo un giro hace unos meses, luego de los enfrentamientos con los últimos ministros de Agricultura que no le dan mucho juego en el sector.

Los representantes volvieron a pedir la renuncia de Lizarralde alegando que ha violado la institucionalidad agropecuaria al reunirse con voceros de las dignidades. “A ellos si les garantiza recursos, pero con los demás no hace nada”, aseguró la fuente. De igual forma, han manifestado que su mayor preocupación es la infraestructura de las vías terciarias que les dificulta sacar sus productos al mercado.

Los sectores se preguntan cómo el Gobierno pretende diseñar una hoja de ruta cuando continúan rezagados proyectos para el campo como la Ley de Desarrollo rural y la de baldíos.

La próxima junta directiva (que tendrá lugar el 26 de marzo) será clave para analizar la continuidad del actual presidente de la SAC, una sentencia confirmada por uno de los asistentes a la reunión, y quien por obvias razones, pidió que se mantuviera en reserva su nombre, pues las férreas posiciones de Mejía no interpretaban el sentir de los todos gremios de la producción agropecuaria.

Una cartera sin continuidad
El primer titular de la cartera agraria durante el gobierno de Juan Manuel Santos fue el abogado y economista Juan Camilo Restrepo, quien presentó su carta de renuncia desde abril, aunque fue aceptada en mayo. Independientemente de sus razones, Restrepo no es bien recordado por las protestas desde diferentes sectores agrícolas que tuvo que manejar, principalmente el paro cafetero. Posteriormente se nombró a Francisco Estupiñán, quien asumió el liderazgo en medio de una crisis que no se había podido resolver, por la misma razón no pasaron muchos meses antes de que lo sucediera el abogado y economista Rubén Darío Lizarralde, quien tampoco ha escapado a las críticas del sector. Tan así, que en repetidas ocasiones los gremios del sector han presionado para que entregue su cargo, sin embargo, el Primer Mandatario nunca les ha dado la razón y lo ratifica en su cargo en cada oportunidad.

Henry vanegas
(Fenalce)
El gremio que reúne a los productores nacionales de maíz, fríjol, soya, cebada y trigo están inconformes con el ministro de Agricultura, Rubén Darío Lizarralde, porque según un comunicado de la Federación “no le interesa en lo más mínimo la seguridad alimentaria de los colombianos”. Protestan por los bajos precios en el último cuatrienio y porque se han cansado de pedir medidas contracíclicas para “paliar esa coyuntura de los TLC en la actual cosecha”. Piden subsidios “sin pena” a la agroalimentación.

Rafael Hernández
(Fedesarroz)
El contrabando y la falta de una política clara para combatirlo es el problema del gremio arrocero. Su presidente en contadas ocasiones ha dicho que la solución no es producir menos, sino combatir el arroz ilegal que llega desde las fronteras. Luego de que Venezuela pusiera restricciones al contrabando, el precio del arroz en la frontera y las compras aumentaron. Hernández aseguró que los agricultores están desesperados porque el Gobierno Nacional y el ministro Lizarralde no los están escuchando.

Luis Genaro Muñoz
(Federacafé)
A pesar de que el precio del café ha respondido positivamente gracias a la sequía en Brasil y a que el PIC funcionó para el sector. Según el presidente de la Federación el subsidio solo es una parte de las peticiones que le han hecho al Gobierno. “Colombia retrocedió en factores de productividad básica del campo: deterioro en vías, infraestructura básica como acueductos, vivienda rural, situación de pobreza, mala educación”. Para los cafeteros la apertura a TLC ha sido oportuna y consideran necesario continuar con ellos.

Álvaro Palacio
(Asohofrucol)
Para el sector hortifrutícula los planes de impulso son buenos. Sin embargo, su planeación se ha demorado mucho y eso ha retrasado en parte la productividad del sector para convertirse en despensa del mundo y poder entrar a mercados internacionales. Palacio asegura que ya deberían haber áreas de fruta sembrada como la fresa, donde se definieron zonas óptimas para cultivarla. El Programa de Transformación Productiva (PTP) encontró que el sector presenta atrasos en competitividad.

Alejandro Estévez
(Fedepapa)
Los agricultores vinculados a Fedepapa marcharán el próximo 17 de marzo como protesta contra el gobierno del presidente Juan Manuel Santos para exigirle respuestas sobre la política de seguridad alimentaria a corto y mediano plazo y cuestionar cómo el Gobierno atenderá de forma competitiva a la demanda del país. Estévez ha peleado para que el ministro Lizarralde responda por los pagos a los productores que hace tres años exportaban a Venezuela, una gestión que hasta hoy se ha visto corta.

Las opiniones

Rubén Darío Lizarralde
Ministro de Agricultura y Desarrollo rural
“Vamos a ser más completos y establecer objetivos específicos para hacer seguimiento a cada uno de los puntos que le preocupa a los sectores”.

Rafael Mejía
Presidente de la Sociedad de agricultores
“Vamos a discutir en una junta si se justifica seguir haciendo los gremios regionales o se va a manejar transversalmente a través de los gremios”.

Álvaro Palacio
Presidente de Asohofrucol
“El presidente Santos le pidió al Ministro que tomara puntualmente cada uno de los gremios y pactara una cita para atendernos”.