Collins, contratista de Bogotá-Girardot, pagaría la sanción de Contraloría

Carlos Collins, el contratista del Túnel de La Línea, y quien participa en la sociedad Concesión Autopista Bogotá-Girardot S.A, dice que pagará los $8.924 millones que le impuso la Contraloría General, tras un fallo definitivo de responsabilidad fiscal emitido hace unos días. Con ello busca evitar que el contrato entre en un proceso de caducidad que anunció esta semana la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI).

Carlos Collins, el contratista del Túnel de La Línea, y quien participa en la sociedad Concesión Autopista Bogotá-Girardot S.A, dice que pagará los $8.924 millones  que le impuso la Contraloría General, tras un fallo definitivo de responsabilidad fiscal emitido hace unos días. Con ello busca evitar que el contrato entre en un proceso de caducidad que anunció esta semana la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI).

Collins dice que buscará con el contralor General, Edgardo Maya, un plan de pagos, pero indicó que, aún cancelando la sanción que hace a la concesión responsable de detrimento patrimonial al estado por pago de anticipos, emprenderá un proceso jurídico contra el mismo fallo, que considera viciado e irregular.

Esto abre un nuevo capítulo dentro de un pulso que el contratista ha venido sosteniendo con el exdirector de Invías, Leonidas Narváez y funcionarios de la Contraloría, entre ellos el excontralor Delegado para la Infraestructura, Nelson Izáciga y la directora jurídica de la entidad, Lina María Tamayo.

Ayer Collins hizo pública una grabación de noviembre de 2013, de una reunión en el despacho de la entonces ministra de Transporte, Cecilia Álvarez-Correa, en la que participan ella, Narváez, el interventor Enrique Ávila y Collins entre otros, para tratar el tema del riesgo geológico el proyecto Túnel de La Línea. Con ella, señala Callins busca probar que  sí había conexión entre Narváez e Izáciga, que estaban aliados y que lo perseguían.

Collins señala además que puso una demanda penal contra Izáciga y Tamayo por, supuesta, extorsión, por hechos ocurridos en 2011, cuando la Contraloría le abrió un proceso de indagación preliminar por atrasos en las obras del Túnel de La Línea y posible detrimento patrimonial.

Sin embargo, Leonidas Narváez, exdirector de Invías, le aseguró a LR, que ya le había dado las declaraciones a la justicia. “Lo que dice es falso y no quiero formar más polémica por el tema". Mientras que, la exministra de Transporte, Cecilia Álvarez-Correa prefirió no pronunciarse al respecto.

“Un tipo se presentó y me mostró el documento de indagación premilitar sin la firma de Lina María Tamayo. Lo que entendimos con ese acto es que la resolución podría o no salir si había plata de por medio”, dijo. La apertura de la indagación preliminar sí fue realizada por la Contraloría.

“Le puse en conocimiento a la Contralor (Sandra Morelli) pero no hizo nada y lo que sentí fue que arreciaron contra mí. Me abrieron cuatro juicios fiscales por Bogotá Girardot” agrega.

Collins señala que recusaron a Tamayo, pero Morelli le dijo que no se declarara impedida.

Finalmente la apelación, que resolvía la contralora Morelli, deja en firma el fallo de responsabilidad fiscal contra un exdirectivo del Invías y la concesión Autopista Bogotá Girardot S.A.

“El expediente tenía 64 cuadernillos, pero falló (Morelli) en seis horas y se fue para Italia”, dijo Collins, quien insiste que el fallo fue irregular y está viciado.

Hallazgos fiscales en torre de Eldorado
Cinco hallazgos fiscales por $7.836 millones encontró la Contraloría General al evaluar el manejo de los recursos públicos invertidos hasta agosto de 2014 en la construcción de la Torre de Control del Aeropuerto Eldorado. El organismo de control encontró deficiencias en la planeación, estudios y diseños del proyecto que han traído como consecuencia atrasos en su ejecución, de un año aproximadamente.