Cinco puntos pendientes que debe resolver la reforma agraria para incentivar la actividad

Analistas consultados por LR coinciden en que la concentración de la tierra, el papel del campesino en la cadena, la inseguridad jurídica, el desarrollo productivo y el crecimiento económico son los principales pendientes que se resolverían con la intervención legislativa.

Aún así, hay quienes opinan que la reacción del Gobierno y la intervención del Ministerio de Agricultura ha estado muy por debajo de lo que se espera frente a un reto de tales dimensiones, más ahora que se tienen los estudios como insumo principal para tomar decisiones.

De acuerdo con la exministra y exdirectora del Departamento Nacional de Planeación Cecilia López con el Censo Agropecuario ya se tiene una información valiosa que serviría de base. “Antes podía haber toda clase de disculpas, pero ya se acabaron. En adelante, el que no actúe debe asumir un costo político muy alto”, dijo.

Por su parte, el codirector del Banco de la República Adolfo Meisel recordó que la propiedad de la tierra es uno de los elementos que ha sido combustible del conflicto. “Hay que hacer una reforma que solucione los despojos de los últimos años a los campesinos por parte de grupos violentos”. Y llamó al Gobierno a trabajar en ello: “estamos a tiempo de hacerlo a pesar de que se trate de un proceso histórico complejo, pues seguimos en medio del conflicto”.

López aseguró que en los últimos años lo que se ha vivido es una “contrarreforma agraria”, por cuenta de dos problemas fundamentales: el crecimiento acelerado en latifundios y la fragmentación en minifundios.

En ello coincidió el exministro de Agricultura Juan Camilo Restrepo. “En Colombia ha habido una concentración en la propiedad relativamente importante en los últimos años y también hay una excesiva atomización de la tierra en ciertas regiones”, argumentó. Esto se evidencia en el Censo Agropecuario del Dane que advierte que 69,9% de las unidades productivas tienen menos de cinco hectáreas y representan menos de 5% del territorio, lo que significa un desplazamiento de la economía campesina.

Restrepo apoya la búsqueda de mecanismos para mitigar estas desigualdades que además han derivado en problemas de inseguridad jurídica para los inversionistas: “si por reforma agraria se entienden políticas que corrijan esas malformaciones, sí se justifica en este momento y debe ser prioritaria”.

“La historia de Colombia ha sido de concertación de la tierra pero eso no puede seguir así”, indicó López, al tiempo que propuso dejar de lado el contenido político para no cometer viejos errores. “No hay que quitarle la tierra a nadie por la fuerza para dásela a los campesinos,  pero sí hay que obligar a los propietarios a ser productivos para jalonar el desarrollo del sector”.

LR consultó a un importante economista vinculado a la Misión Rural quien explicó que frente a los problemas alrededor del desarrollo agropecuario, especialmente en lo referente a la tierra, el Gobierno está alistando varias propuestas, entre ellas la creación de una Agencia Nacional de Tierras, atendiendo así a las recomendaciones de la Ocde y a los acuerdos en el marco de diálogos de paz.

El mal ejemplo de las reformas en Latinoamérica
Las reformas agrícolas de la región en el Siglo XX se han calificado como revoluciones frustradas por no cumplir con el objetivo de redistribuir tierras excesivamente concentradas por grandes propietarios. El exministro Juan Camilo Restrepo advirtió que no puede hacerse en Colombia un proceso de ese tipo. “No se trata solo de distribuir tierras y ya, eso debe ir acompañado de una abundante provisión de bienes públicos y de una política que respete la propiedad privada”.

Las opiniones

Juan Camilo Restrepo
Exministro de Agricultura
“Hay varias recomendaciones de la Misión Rural que van en el camino de implementar una reforma agraria. Los diálogos de La Habana también apuntan en esa dirección”.

Cecilia López
Exministra y exdirectora del DNP
“El sector rural nunca tuvo prioridad y la acumulación de esas fallas le tocó a este Gobierno. Si ese no hubiera sido el primer punto en La Habana, no tendríamos nada”.