Acesco, el mejor aliado para la innovación aeronáutica de Colombia y América Latina

En la actualidad, el acero es un material importante porque ningún otro reúne sus características: resistencia y versatilidad. Y aunque, más de la mitad del acero producido en todo el mundo se destina a edificios e infraestructuras, su uso puede ser para distintas funciones. Es el caso del acero galvanizado de Acesco, el cual se convirtió en el material principal de los deflectores jet blast, una tecnología de seguridad usada en la aeronáutica.

Los deflectores para aeropuertos son estructuras en placas de acero que sirven para controlar y reducir el flujo de aire (jet blast) que expulsan los motores de reacción de los aviones. En el país, Vortex Deflector es la empresa dedicada a innovar con esta herramienta, es por esto que buscaron y encontraron en Acesco un aliado estratégico, que tuviera el mejor material en el mercado.

Su primer trabajo juntos fue el deflector para el aeropuerto de Rionegro, el cual está inspirado en la aerodinámica de los insectos. Esta tecnología reduce sustancialmente la velocidad del flujo de aire que sale de las turbinas, al tiempo que lo dirige hacia arriba.

La fabricación de los deflectores tomó tres meses y 15 días para así poder hacer la instalación de las láminas de acero, y hoy, esta tecnología está posicionando al Aeropuerto como uno de los más eficientes y rápidos en sus operaciones a nivel Latinoamericano.

“Esto requería de la construcción de una estructura especial constituida por materiales que soportaran condiciones exigentes y el acero galvanizado de Acesco fue el ideal para lograr el objetivo, pues cumplía con los estándares aeronáuticos”, indicó Juan Felipe Correa, cofundador de Vortex Deflector.

El resultado fue una estructura con 52 metros de ancho, seis de alto y un total de 16 toneladas de acero provisto por Acesco. Este Deflector de Vórtice reduce en 50% el tiempo de pushback (reversada) ya que no es necesario llevar la aeronave a un punto distante para que encienda sus turbinas.

“En el mercado normalmente existen varios tipos de acero galvanizado (de 120, 180 y hasta 275 grs/mt2), sin embargo, la Aeronáutica necesitaba un recubrimiento de mínimo 45 micras y en Acesco lo logramos desarrollando un recubrimiento de 400 gramos de galvanizado”, explicó Rafael Rozo, director Comercial del Segmento Industria de Acesco.

Asimismo, el ahorro de espacio les permite a los aeropuertos generar un menor impacto ambiental, ya que necesitan poco espacio para operar – y, por lo tanto, menos zonas construidas – y los aviones consumen menos combustibles.

“Se calcula que esta barrera instalada en el Aeropuerto de Rionegro está ahorrando aproximadamente US$600.000 anuales en combustible, que equivale a 3.300 toneladas de carbono menos en el año”, comentó Juan Felipe Correa.

Debido a los resultados positivos, esta tecnología desarrollada en Colombia por empresas 100% locales es vista con buenos ojos en otras partes de América Latina. La unión de estas dos empresas demostró que la innovación apoyada por materiales de calidad son una combinación ganadora.