Plagio de marcas (sexta parte)

Los recursos que provee Internet para bajar contenido han venido causando grandes pérdidas a innumerables industrias, especialmente a la discográfica y cinematográfica. Hoy ya es posible descargar estos contenidos, pero como es natural, los autores, y los  distribuidores quieren proteger sus derechos y cobrar por ellos. Continuamos con la sexta y última entrega del tema: plagio de marcas.

¿Qué significa DRM?
La DRM, Gestión de Derechos Digitales, (sigla en inglés de Digital Rights Management) es un término genérico que se refiere a las tecnologías de control de acceso usadas por editoriales y titulares de derechos de autor para restringir el uso de medios o dispositivos digitales. También se utiliza para referir a las restricciones asociadas a instancias específicas de obras digitales o dispositivos.

Los DRM se traslapan con la protección de copia de software hasta cierto punto, aunque, el término DRM es generalmente aplicado a medios creativos (música, películas, etc.) mientras que el término “protección de copia” tiende a referirse a los mecanismos de protección de copia en software computacional. 

¿Qué diferencia hay entre copyright y derecho de autor?
El derecho de autor y copyright constituyen dos conceptos sobre una propiedad, sea literaria o artística. El derecho de autor proviene del derecho francés, mientras que el copyright procede del derecho anglosajón (o common law). El derecho de autor se basa en la idea de un derecho personal, fundado en una forma de identidad entre el autor y su creación. Este derecho moral reconoce que la obra es expresión de la persona del autor y así se le protege.

Por el contrario, el copyright se limita estrictamente a la obra, sin considerar atributos morales del autor en relación con su obra, excepto la paternidad. El copyright tiene derechos que determinan las modalidades de utilización de una obra. Cualquier trabajo original, sea un texto, una frase, una fotografía, un dibujo, una composición musical, o programa informático, esté publicado o no, está protegido por la ley de copyright. Las mismas layes de copyright, son aplicables a todo lo que se publique por Internet. Pero este registro no es expresamente necesario para que sea ilegal que alguien copie o reproduzca un trabajo sin permiso del creador. En otras palabras, el hecho de que un trabajo tenga copyright, no implica que esté seguro. 

¿Qué hacer en un caso de violación de copyright? 
La violación de los derechos de autor es un hecho muy frecuente en Internet. Aquí resumimos algunos consejos ofrecidos por Entireweb sobre cómo actuar si se descubre que los contenidos de una página web están siendo copiados por terceros.

1.) Póngase en contacto con el infractor visitando su página Web  para obtener su información. Si no se consigue, debe realizar una búsqueda por “who is” introduciendo su URL. La información de contacto del propietario de la Web debe estar ahí. En caso contrario, la de su hosting. El primer contacto debe ser civilizado.

2.) Si el contacto inicial con el infractor no da los frutos esperados, el siguiente paso es enviar un aviso de suspensión. No es necesario contratar un abogado para hacer esto. En Internet se pueden encontrar diferentes modelos.

3.) Envíe una copia por correo electrónico al infractor y otra por correo certificado con el propósito de que parezca lo más oficial posible.

4.) En caso de que el infractor no atienda este requerimiento, envíe un aviso de suspensión o cese al hosting del sitio Web del infractor. La mayoría de empresas de alojamiento de páginas web actuarán retirando temporalmente el sitio Web del infractor hasta que el material copiado haya sido retirado.

5.) Notifique la infracción a los motores de búsqueda. Por último, Entireweb recomienda llevar un registro con copias back-up y sus correspondientes fechas de publicación, con el fin de demostrar que la otra parte miente si afirma haber publicado el contenido antes.