Uomo, una bicicleta decorada con piel de serpiente

El debate está ahí. ¿Qué es arte? ¿Puede ser una obra funcional y trascendental a la vez? Para responder a esta pregunta, y para dar luz, belleza y estilo a uno de los gestos de moda del momento -sí, montar en bici es cool- la empresa lanzó este producto.

Construida como una joya funcional, esta pieza no es apta para ciclistas valientes y aventureros -los expertos recomiendan no salir de casa con ella- ¿La razón? Su peculiaridad va más allá de la piel de serpiente y el oro. El proceso de pintado es otra de sus características más peculiares. Así, la bicicleta está cubierta con una capa de negro mate pero con reflejos brillantes. Un viaje de colores entre el dorado y el plateado que dan vida a una pieza única.

Incluso, los pedales del producto llevan oro incorporado, lo que ofrece más razones para no querer posar un pie sobre ellos. Parte de los 24 quilates de oro que incorpora la bicicleta se encuentran en esta parte.

Para más inri, los radios trenzados o el sistema de frenado específico también convierten a esta pieza en algo, cuanto menos, intrigante.

Junto con estos detalles, la bicicleta tanto en el manillar como en el sillín se encuentran forrados con piel de serpiente sintéticas que, según la compañía que la comercializa, le aportan sobriedad. Aunque no deja de ser una bicicleta, la empresa italiana a Strana Officina Cellini ha optado por crear un producto más cercano a la obra de museo. Además de la capa de color negro mate y los reflejos, los radios entrelazados son otro de los rasgos que convierten a esta bicicleta en una pieza única.

Según la compañía, el manubrio de la bicileta tiene una forma “muy esbelta, deportiva, buscando un aspecto muy agresivo”.