MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
En la lógica, la etiqueta de cada prenda muestra su precio pero también el precio del alquiler por día.
La iniciativa que se encuentra en una calle de la capital neerlandesa se creó para hacerle frente a la lucha contra el cambio climático
En una concurrida calle del centro de la capital neerlandesa se encuentra la primera biblioteca de ropa conocida en Ámsterdam. Se trata entonces de una tienda que permite no tomar libros en préstamo sino vestidos, abrigos, blusas, y chaquetas originales.
Esta vitrina ofrece una colección muy variada formada por cientos de prendas que se renuevan de forma periódica y que también están disponibles para su venta. En la lógica, la etiqueta de cada prenda muestra su precio pero también el precio del alquiler por día, el cual suele oscilar entre 50 céntimos y unos pocos euros.
Fashion Network explicó que la "biblioteca" también ofrece su colección por Internet y tiene puntos de entrega y recogida en otras ciudades holandesas.
Pero, ¿cuál fue la razón detrás de esta iniciativa? Según explicaron, esto se trataría para limitar el impacto medioambiental de la industria de la moda.
Y es que, según la ONU, en la era de la moda rápida, una persona media compra 60 % más de ropa que hace 15 años, sin embargo, cada prenda se conserva la mitad de tiempo. Además, es la industria de la moda una de las más contaminantes, pues aporta un tercio de los microplásticos tóxicos que se vierten en los océanos y consume hasta 215 000 billones de litros de agua al año.
El balance cara a cara entre los dos veteranos jugadores se inclina del lado del alemán, que ha ganado siete de sus 10 enfrentamientos
La casa de moda alemana busca recuperarse de un período difícil racionalizando su gama de productos y aumentando los precios
Uno de los más destacados en el ranking fue el restaurante bogotano, El Chato, a cargo del chef Álvaro Clavijo, el cual se llevó el puesto número uno