El ecoturismo se libera del aire hippie y se trepa en los árboles de la ciudad de Lulea, Suecia

Dormir en lo alto de una casa en el árbol puede dejar de ser uno de sus juegos de infancia para convertirse en las mejores vacaciones jamás tomadas en medio del bosque.

Nada de boy scout o camping improvisados, se trata del TreeHotel, ubicado a 50 kilómetros de la ciudad de Lulea (Suecia). Ha sido construido por un grupo de arquitectos vanguardistas pensando en el confort y el lujo, pero bajo el concepto `eco` y los valores de sostenibilidad. Muy diferente al tono `hippie` que revestía el ecoturismo hace unos años, cuando tenía poco sinónimo a comodidad.

El proyecto cuenta con cinco habitaciones de sorprendente diseño temático: un ovni, un cubo de espejos, el nido de un pájaro, una cabina y un sauna; todas se levantan entre 4 y 6 metros del suelo, ofreciendo una vista panorámica del río Lulea. Promete quitarles el estrés a los huéspedes y sumergirlos en un ambiente pacífico.

¿De dónde surgió la idea?
Sus propietarios, Kent Lindvall y Britta, se inspiraron en la película The Tree Lover de Jonas Selberg Augustsén, que relata la historia de un hombre de ciudad que redescubre sus raíces en una casa en un árbol. Los materiales utilizados para la construcción causan el menor impacto posible en el ambiente, y no se cortó ningún árbol. Los suelos son de madera Eco, no contienen sustancias químicas. Las habitaciones se calientan con un sistema de suelo radiante y la electricidad se suministra localmente por sistemas verdes hidroeléctricos. En cuanto a la iluminación, solo se utilizan LEDs de baja energía. No tienen sistema de alcantarillado, por ello los sanitarios tienen un sistema sostenible de incineración por combustión a 600ºC.

Tanto en invierno como en verano, puede disfrutar de actividades desde caminatas o bike tours históricas y culturales en los alrededores, ciclismo de montaña, trekking, kayak, cabalgatas, safaris en trineo, pesca de hielo. Se proyecta ampliar el número de habitaciones a 24 para 2012.