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Uno de los grandes motores de este cambio, sin duda, es el universo gamer. Solo en 2024, el mercado de videojuegos en Colombia superó los US$800 millones y seguirá creciendo a doble dígito en la próxima década.
Cada vez que pienso en el ecosistema digital en Colombia, me sorprende cómo los accesorios para computadores dejaron de ser un “extra” para convertirse en protagonistas. Teclados, audífonos, monitores o sillas no solo acompañan al PC: hoy lo potencian, lo transforman y lo convierten en una plataforma versátil que conecta mundos tan distintos como el gaming, el trabajo híbrido y la creación de contenido.
Uno de los grandes motores de este cambio, sin duda, es el universo gamer. Solo en 2024, el mercado de videojuegos en Colombia superó los US$800 millones, y la proyección es que seguirá creciendo a doble dígito en la próxima década. Este impulso se refleja en una fuerte demanda de laptops de alto rendimiento, monitores especializados, teclados mecánicos y equipos adicionales orientados a gamers, creadores de contenido y profesionales creativos.
Estamos entrando en una nueva era donde la IA no solo impulsa a los computadores, sino también a los equipos que los rodean. Desde audífonos hasta monitores, más que un accesorio se convierten en un complemento que eleva la experiencia digital de las personas a otro nivel.
Y es que el trabajo híbrido no se queda atrás. Con más de 70% de las empresas en la región operando con esquemas flexibles, según el informe HRTrends 2025 Latam, los colombianos están buscando cada vez más ergonomía, comodidad y eficiencia. Los accesorios, desde un mouse ergonómico hasta un hub de conectividad, se han convertido en piezas clave para armar puestos de trabajo que se adapten a distintos escenarios, ya sea una reunión en línea, un proyecto creativo o una maratón de videojuegos después del horario laboral.
A esto se suma la implementación de la inteligencia artificial. Ya no hablamos solo de computadores que aprenden, sino de accesorios inteligentes que se ajustan a nosotros: monitores que calibran automáticamente su brillo, audífonos que personalizan la cancelación de ruido o teclados que entienden nuestra forma de escribir. Estos avances se están convirtiendo en nuestra cotidianidad y marcan un punto de inflexión en cómo nos relacionamos con la tecnología. Las cifras lo demuestran. A nivel global, el mercado de equipos y accesorios para PC se proyecta crecer con una tasa compuesta de alrededor de 12,13% anual entre 2024 y 2029, alcanzando aproximadamente US$48.900 millones para 2029.
En cuanto al contexto local, vale destacar que, según Procolombia, el sector de videojuegos en Colombia generó negocios por US$14.024 millones en 2024, un claro indicador del potencial exportador y del crecimiento del ecosistema digital del país.
La inteligencia artificial, en definitiva, está y seguirá redefiniendo nuevas tendencias en el uso de equipos, donde los complementos para computadores han pasado de ser accesorios menores a componentes estratégicos del ecosistema digital colombiano. En un entorno marcado por hábitos culturales cambiantes, exigencias tecnológicas y realidades económicas, el consumidor colombiano es exigente, informado, creativo y consciente del valor de su inversión tecnológica. Para mí, ahí está la clave: entender que lo que antes llamábamos “accesorios” ahora son componentes estratégicos de la vida digital.
