MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
El cierre de las fronteras y el deseo de regresar por parte de los migrantes podrían generar esquemas de tráfico de personas
De acuerdo con un estudio publicado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) denominado ‘Migración en la región andina: Impacto de la crisis y expectativas en el mediano plazo’. Cerca de 330.000 migrantes venezolanos que están viviendo en Colombia podrían regresar a Venezuela debido a la crisis que ha generado la pandemia del covid-19 en el país.
Sobre el posible retorno de los ciudadanos venezolanos a su nación, Migración Colombia compartió que “el Gobierno Nacional ha generado una medida excepcional para permitir el tránsito organizado de aquellos venezolanos que por su condición requieren regresar sin generar represamientos en zona de frontera y manteniendo la seguridad sanitaria”.
Según la entidad nacional, a la fecha han retornado a Venezuela un poco más de 71.000 ciudadanos venezolanos. Esta salida masiva se da en un momento en el que Colombia tiene más de 35.000 casos positivos para covid-19, por lo que Luis Alejandro Gómez Barrera, director de la maestría en Salud Pública de la Universidad El Bosque, aseguró que en medio de este panorama, uno de los obstáculos para atender mejor a la población de migrantes venezolanos ha sido la ruptura total de comunicación con el gobierno en ejercicio de ese país.
“En cualquier situación extrema, los gobiernos se comunican y acuerdan procedimientos válidos para favorecer a los más vulnerables, pero hasta ahora, no ha sido posible establecer estos canales, por lo que es un reto el gran número de venezolanos que desean volver a su país”, dijo Gómez Barrera.
El reto que tienen las autoridades para ayudar al retorno de los ciudadanos venezolanos a su país no es algo exclusivo de Colombia, sino que también está afectando a Ecuador y Perú. Según la publicación del BID, el número de migrantes que se ha establecido en la región andina alcanzó alrededor de tres millones de personas el año pasado, por lo que el organismo señaló que esta crisis podría hacer resurgir la presión hacia la emigración en el mediano plazo.
Dicha necesidad combinada con “el endurecimiento del control de fronteras puede generar esquemas de tráfico de personas como en México y Centroamérica para facilitar el cruce de las fronteras, teniendo implicancias de seguridad pública y de salud”, citó el BID.
Esta posibilidad se abre en medio de un panorama en el que casi la mitad de los migrantes venezolanos en la región andina son irregulares y muchos de ellos podrían perder el empleo que tienen por la crisis. Esto ha dificultado la atención por parte de los gobiernos
Sobre esta caracterización, Alberto Castillo Aroca, director del Observatorio Latinoamericano de Desarrollo Sostenible (Olds), agregó que “en 2018 la mayoría de los refugiados y migrantes venezolanos eran hombres jóvenes que eran la primera avanzada de un proceso de migración familiar. Hacia 2019 y 2020 hubo un aumento de las mujeres y niños provenientes de Venezuela”.
El impacto de la pandemia del covid-19 sobre los migrantes
Según la publicación del BID, “la pérdida de empleo en los países de destino sería superior a 5% de los migrantes empleados (la cifra real dependerá de cuál de los escenarios analizados se imponga sobre los demás), alcanzando alrededor de 40% en caso de que los migrantes sean los primeros en ser despedidos por sus empleadores”. Además, en el corto plazo se puede esperar un aumento del flujo de migrantes retornados. Según estimaciones realizadas para Colombia, hasta 19% de los migrantes podría decidir volver.
Aunque hubo una caída de 18% en las operaciones, el valor creció 9%; Colombia es el cuarto con mayor número de negocios
Washington ha prohibido a la empresa vender sus semiconductores más avanzados a empresas chinas, algo que criticó Pekín
Europa ha recibido llamados para reducir la carga regulatoria sobre las empresas, en medio de la preocupación de que la burocracia perjudique la eocnomía