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Simon herchen, embajador adjunto de Alemania en Bogotá, aseguró que el país tiene oportunidades de inversión en energías limpias
En más de un siglo de presencia alemana en Colombia, la relación bilateral se ha consolidado como un pilar de inversión, cooperación y visión de largo plazo. Bajo la mirada de Simon Herchen, embajador adjunto de Alemania en Bogotá, esta alianza avanza hacia sectores estratégicos como las energías limpias, la movilidad sostenible y la innovación tecnológica. Con un comercio que supera los miles de millones de dólares y más de 300 empresas vinculadas, Alemania reafirma su compromiso en el desarrollo del país.
Alemania ya tiene una larga trayectoria de la cooperación comercial con Colombia. Hay empresas que existen acá en el país que ya llevan más de 100 años; los sectores donde estamos muy fuertes son el farmacéutico, tecnología y automatización.

Tenemos un volumen de comercio bilateral de aproximadamente US$3.804 millones. Alemania sigue siendo el mayor socio comercial de Colombia dentro de la Unión Europea. Cerca de 25% de las exportaciones que llegan de la Unión Europea a Colombia provienen de Alemania y cerca de 11% de las exportaciones de Colombia a la Unión Europea llegan a mi país. La mayoría de los productos de la parte alemana vienen del sector farmacéutico, maquinaria, etc; las exportaciones colombianas hacia Alemania son mayormente del sector primario, tanto de agricultura, agropecuario, pero también en el sector de minería.
El gran potencial en este momento es el sector de energías renovables. Ahí hay varias áreas, eficiencia energética, la parte de movilidad sostenible, pero también temas específicos como hidrógeno verde e hidrógeno de bajas emisiones. La otra área es el sector de transporte, sobre todo en la parte urbana, movilidad sostenible, pero también en el tema ferroviario. La infraestructura, los trenes, todos esos planes que existen para Colombia donde hay muchos retos al mismo tiempo.
A través de nuestra Cámara de Comercio e Industria Colombo-Alemana tenemos más de 320 miembros en ese momento y aumentando. La mitad de estas son empresas alemanas que tienen negocios en Colombia y la otra mitad son empresas colombianas con un vínculo hacia Alemania. Si hablamos de inversiones directas, hay un aumento tremendo en los últimos 15 años. Venimos de US$1.151 millones en 2010, llegando en 2023 a US$2.993 millones acumulados.
Siempre hay que mantener el equilibrio entre los incentivos y las cargas que existen. Hay ciertos puntos ya existentes en Colombia, sobre todo en temas que tienen un vínculo con el medio ambiente; más allá de eso, hay potencial de cómo desarrollar eso, tanto para dar incentivos a los que invierten, a los productores, pero también a los consumidores.
Tenemos relaciones diplomáticas por más de 150 años, la Cámara Colombo-Alemana lleva 90 años. Empresas como Bayer existen en Colombia ya hace más de 100 años. Trabajamos a largo plazo, siempre, tanto políticamente como las empresas, continuidad es uno de nuestros temas principales. Vamos a seguir invirtiendo y haciendo relaciones políticas comerciales a ese largo plazo.
Esto depende no solamente del gobierno actual, sino también cualquier gobierno que viene, gobiernos anteriores, porque ahí vemos que hay un reto en planes a largo plazo, además, crear marcos regulatorios a largo plazo.

En los últimos cuatro años, empezando por la pandemia, pero aún más reforzado por la invasión de Rusia en Ucrania, nos ha demostrado las diferentes dependencias en el tema comercial. Por este motivo siempre buscamos ampliar la matriz energética y diversificar los mercados.
Una energía bastante barata nos ayudó en el tema de exportación. Ahora tenemos que competir con otras, tenemos que ampliar la matriz energética y eso lo estamos haciendo también con la ayuda y la cooperación con Colombia. Tenemos que diversificar también los diferentes mercados. En eso siempre estamos, por eso tenemos la cooperación tan profunda con Colombia, pero también tenemos bastantes retos de reformas internas en Alemania.
Un país que depende tanto como nosotros de la exportación, necesita crear incentivos en la misma medida. Crear herramientas como ayudar a las empresas a nivel político, con el trabajo diplomático que hacemos, a nivel multilateral, proteger el sistema internacional basado en reglas, porque países que exportan necesitan esa seguridad de un sistema global que funciona, de leyes y acuerdos que se cumplen, la fuerza del derecho y no el derecho del más fuerte.
Hay un gran potencial, tanto en tema eólico como fotovoltaico, tenemos ya varias empresas alemanas grandes que están involucradas en el país en venta de maquinarias, en logística, en contribuir a desarrollar una infraestructura.
Tenemos varias empresas alemanas que están haciendo primeros trabajos en, por ejemplo, La Guajira, que tiene un potencial excepcional en la producción de energías renovables, pero tiene también sus propios retos.

Cada año tenemos cifras récord de los becarios que van hacia Alemania, las cifras absolutas en los últimos años son más altas que de Brasil y de México. Estamos hablando de casi 4.000 colombianos que están estudiando en este momento en Alemania; hay 400 cooperaciones entre universidades alemanas y colombianas. En 2023 había casi 2.500 receptores de becas. Depende de nuestros recursos, porque todas las becas trabajan a través de recursos alemanes. Por lo cual hay una competencia con los que aplican en la región y a nivel global.
Tiene un rol de largo plazo, tanto en el tema empresarial, pero también otra vez con esas redes personales. La Cámara lo que también tiene son varias mesas de trabajo donde se unen esas empresas temáticamente, energías renovables, una mesa naval y el sector farmacéutico para el desarrollo de propuestas donde trabajan no solamente por sí mismos, sino en equipo para mejorar y dar nuevas ideas.

Simon Herchen, embajador adjunto de Alemania en Bogotá, se desempeñó en Berlín durante cuatro años como Jefe Adjunto de la Unidad de Cooperación Internacional contra el Terrorismo y el Crimen Organizado del Ministerio Federal de Asuntos Exteriores antes de asumir su cargo como embajador adjunto en Colombia. Además, de 2018 a 2019 fue Jefe Adjunto de la Embajada de la República Federal de Alemania en Bamako, y entre 2012 y 2015 fue Jefe Adjunto de la Sección Política de la Misión Permanente de la República Federal de Alemania ante la Otan, en Bruselas.
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