Roubini dice que el BOE y el BCE deben subir tasas de interés para evitar la estanflación

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El Banco Central Europeo y el Banco de Inglaterra deben seguir aumentando las tasas de interés para evitar la "estanflación", advirtió el destacado economista Nouriel Roubini.

El famoso pesimista Roubini dijo que el reciente aumento de los precios del petróleo mantendrá alta la inflación general y que cualquier conversación sobre una política monetaria más flexible es prematura. El BCE y el BOE enfrentan un dilema mayor que la Reserva Federal de Estados Unidos porque los precios en Europa siguen aumentando rápidamente y el crecimiento se está desacelerando, dijo.

El BOE “debería subir las tasas hasta 5,75%”, dijo Roubini el lunes en una entrevista en Bloomberg Television. El tipo de interés oficial del banco central del Reino Unido es actualmente de 5,25% y se espera un nuevo aumento de un cuarto de punto esta semana.

Roubini, profesor de economía y negocios internacionales en la Escuela de Negocios Stern de la Universidad de Nueva York, es famoso por sus pronunciamientos bajistas que le valieron el apodo de "Dr. Doom". Sin embargo, advirtió correctamente sobre el desastre antes de la crisis financiera de 2008 y es seguido por sus opiniones a menudo contrarias a lo convencional.

El lunes recomendó vender acciones estadounidenses durante el resto del año y dijo que los inversores son demasiado optimistas sobre los mercados de crédito y bonos. Advirtió que es posible una caída del 10% en las acciones estadounidenses dado el estado de la economía global, y agregó que a otros mercados bursátiles les iría aún peor.

Los bancos centrales de la eurozona y del Reino Unido están en un aprieto porque la inflación es demasiado alta y las economías se tambalean, pero dijo que necesitan seguir subiendo las tasas para vencer la inflación.

"Ese es un dilema tanto para el BCE como para el BOE", dijo Roubini. “Por un lado, la contracción de la actividad económica los llevará tal vez a detenerse en este punto. Por otro lado, si la inflación sigue siendo mucho más alta que el objetivo, es posible que necesiten un aumento mucho mayor”.

Estados Unidos está en una posición más fuerte, con “buenas noticias” que apuntan a que no habrá un “aterrizaje brusco” para la economía. Pero dijo que los mercados se equivocan al esperar recortes de tasas a principios del próximo año. En cambio, dijo que es posible que la Reserva Federal aún necesite subir más las tasas y que los primeros recortes se producirán “tal vez hacia mediados de año (2024)”.

“No pueden decir que han terminado. La inflación general está subiendo, los precios del petróleo están subiendo, existe la posibilidad de que haya otro aumento”. Se espera que la Reserva Federal mantenga los tipos entre 5,25% y 5,5% esta semana.

Las recientes señales moderadas del BOE son un “problema”. "Las señales nos dicen que no están seguros de querer aumentar más", dijo. Sin más aumentos de tipos, “podría haber un desanclaje de la inflación y una verdadera estanflación”, advirtió.

El BOE cambió su orientación cuando la economía comenzó a desacelerarse. La producción cayó en julio y el desempleo está aumentando. Las autoridades del Reino Unido están hablando de que las tasas se mantendrán altas por más tiempo, en lugar de impulsar más aumentos para controlar los precios. La inflación de los precios al consumidor es actualmente del 6,8%, más de tres veces el objetivo del 2%.

Se espera que las cifras oficiales de esta semana muestren que la inflación del Reino Unido aumentó al 7,1% en agosto debido al aumento de los precios del petróleo, lo que complicará la decisión del BOE del jueves. El BCE elevó las tasas un cuarto de punto, hasta el 4%, la semana pasada e indicó que su ciclo de aumento de tasas estaba cerca de terminar.

Aunque Roubini cree que se requieren tasas más altas, dijo que amenazan con crear sus propios problemas.

Refiriéndose a la crisis de las pensiones en el Reino Unido hace un año y al estallido de la banca regional en Estados Unidos a principios de este año, dijo: “Existen riesgos de inestabilidad financiera. Lo viste en lo que sucedió en el Reino Unido hace aproximadamente un año, viste lo que sucedió en la primavera de este año con las tensiones en el sistema financiero. No creo que estemos fuera de peligro, ya que las tasas tienen que mantenerse altas por más tiempo. La posibilidad de algún grado de inestabilidad financiera todavía está entre nosotros”.

Los cambios estructurales en la economía global –desde el envejecimiento demográfico hasta la geopolítica de la cadena de suministro– mantendrán alta la inflación, añadió. Como resultado, los bancos centrales tendrán que elevar con el tiempo su objetivo de inflación del 2% al 3% o al 4%, dijo.

“Tanto del lado de la oferta como de la demanda, hay factores que implican que el 2% es en este momento una misión imposible. Y la nueva normalidad puede situarse entre 3% y el 4% para las economías avanzadas con el tiempo, por supuesto, no de la noche a la mañana”, afirmó.