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Polución. Foto: Bloomberg.
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Actualmente, los niveles son lo suficientemente altos como para que los humanos sanos e incluso las mascotas experimenten irritación en los ojos y tos
Los funcionarios de salud del noreste de EE.UU. están advirtiendo a los residentes que tomen precauciones después de que el humo de los incendios forestales que viajaba hacia el sur desde Canadá desatara niveles de calidad del aire poco saludables que representan un riesgo para los enfermos, los ancianos y los niños pequeños.
Los funcionarios de la ciudad de Nueva York cancelaron el recreo al aire libre y sugirieron que los más vulnerables usaran máscaras de alta calidad después de que una espesa neblina que cubrió los cielos desencadenó una alerta púrpura durante la noche, el nivel más alto y más peligroso. La advertencia de salud puede durar al menos un día más, dijo el alcalde Eric Adams en una conferencia de prensa. Los líderes de Massachusetts, Maryland, Pensilvania, Nueva Jersey y Washington, DC también emitieron advertencias.
Las partículas y toxinas transportadas por el aire pueden causar complicaciones a las personas con enfermedades pulmonares como asma y enfermedad pulmonar obstructiva crónica, así como enfermedades cardiovasculares, y pueden ser más graves para los niños pequeños y los ancianos. Actualmente, los niveles son lo suficientemente altos como para que los humanos sanos e incluso las mascotas experimenten irritación en los ojos y tos, dijo Daniel Horton , director del Grupo de Investigación del Cambio Climático de la Universidad Northwestern en Chicago.
Edificios en el skyilne de Manhattan envueltos en humo de los incendios forestales de Canadá.
“Estos eventos extremos tienen un impacto particularmente agudo en los humanos y la salud humana”, dijo en una entrevista telefónica. “Lo que a menudo vemos en los hospitales es un aumento en las personas que llegan debido a problemas respiratorios o cardíacos”.
Más de 400 incendios forestales están ardiendo en Canadá, desde la Columbia Británica en el oeste hasta Nueva Escocia en el este, lo que obliga a la evacuación de miles de personas. Pero las corrientes de aire también están empujando el humo miles de millas al sur hacia Estados Unidos.
Una neblina similar se asentó en el noreste en 2021 cuando el humo de los incendios en la costa oeste se propagó por todo el país. Pero la calidad del aire actual es peor, dijo Peter DeCarlo, profesor asociado de salud ambiental e ingeniería en la Universidad Johns Hopkins en Baltimore.
El humo que viaja desde la costa oeste “tiene un poco más de tiempo para diluirse”, dijo DeCarlo. "Debido a que los incendios están mucho más cerca en Quebec y Ontario y el humo se dirige directamente a la costa este, estamos viendo concentraciones mucho más altas de partículas de estos incendios". Es probable que la neblina humeante permanezca durante el resto de la semana dados los patrones climáticos actuales, antes de soplar hacia el océano, dijo Daniel Westervelt , profesor asistente de investigación en el Observatorio de la Tierra Lamont Doherty de la Universidad de Columbia en Palisades, Nueva York.
“Espero que las cosas comiencen a mejorar un poco a medida que nos acercamos al fin de semana, pero el fuego sigue ardiendo”, dijo Westervelt. Los patrones climáticos cambiantes pueden brindar “un poco de alivio, pero no será un cambio de la noche a la mañana. Puede tomar un poco de tiempo para que todo el humo desaparezca”.
El humo de los incendios forestales contiene una mezcla peligrosa de monóxido de carbono y partículas en el aire. Las partículas más pequeñas generan preocupación, ya que pueden ingresar a los pulmones e incluso al torrente sanguíneo. Nueva York ha estado registrando altos niveles de las partículas más pequeñas, conocidas como PM2.5, desde el martes.
El martes por la noche, el índice PM2.5 superó los 200, niveles que rara vez se ven incluso en lugares muy contaminados como la Ciudad de México. La capital de México es una cuenca rodeada de montañas que atrapan el smog en su interior, y en la década de 1980 la contaminación era tan grave que los residentes informaron que vieron pájaros cayendo del cielo.
Todavía puede haber espacio para que la calidad del aire empeore hoy y más adelante esta semana, dijo Suresh Dhaniyala, profesor de la Universidad de Clarkson en Potsdam, Nueva York, que ha estado monitoreando la calidad del aire. Los niveles de partículas en la ciudad de Nueva York llegaron a 75 microgramos por metro cúbico el miércoles, cinco veces las pautas de la Organización Mundial de la Salud para los niveles promedio de 24 horas, según IQAir.
Los efectos sobre la salud son particularmente preocupantes para los niños propensos al asma, dijo Stephanie Lovinsky-Desir , jefa de neumología pediátrica del Centro Médico de la Universidad de Columbia. La mala calidad del aire puede exacerbar el asma a corto plazo, y la exposición crónica está relacionada con un tamaño más pequeño de los pulmones, dijo.
“Esto prepara a nuestros hijos para el riesgo de enfermedad pulmonar hasta bien entrada la edad adulta”, dijo.
Los días de mala calidad del aire están relacionados con un aumento de las enfermedades cardiovasculares en los adultos, dijo Lovinsky-Desir, y es posible que las personas en riesgo deseen mantener las ventanas cerradas y usar filtros de aire si están disponibles. Lovinsky-Desir dijo que para las personas que no tienen la opción de permanecer en el interior, las máscaras KN-95 o N-95 reducen la exposición por inhalación de la contaminación por partículas.
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