Gobierno de Maduro excarcela a 103 personas detenidas tras las elecciones de julio

Autoridades de Venezuela dijeron este jueves que esta semana excarcelaron a 103 personas que fueron detenidas en medio de las protestas tras las elecciones presidenciales de mediados de año.

Tras los comicios del 28 de julio, el presidente Nicolás Maduro dijo que 2.000 personas habían sido capturadas en todo el país por las manifestaciones ciudadanas en contra de los resultados. Las autoridades electorales dieron como ganador al líder socialista, mientras la oposición sostiene que el vencedor fue el ex diplomático Edmundo González.

Las excarcelaciones de esta semana "se realizan en atención a la solicitud que hizo el presidente (...) de revisar todas las causas concernientes a hechos de violencia y delitos cometidos en el marco de la elección", dijo la Vicepresidencia para la Seguridad Ciudadana y la Paz en un comunicado.

Vente Venezuela, el movimiento de la líder opositora María Corina Machado, denunció esta semana la detención de tres dirigentes regionales.

La Fiscalía General dijo en noviembre que 225 detenidos recibieron "medidas de libertad" y que estaban "procesadas por los hechos de violencia ocurridos tras las elecciones del 28 de julio". La mayoría de los excarcelados deben presentarse cada 30 días ante los tribunales, por lo cual distintas ONG de derechos humanos dicen que no se considera una libertad plena.

El fiscal general, Tarek Saab, ha señalado que las protestas dejaron 28 muertos y casi 200 lesionados, así como unos 500 bienes muebles públicos y privados destruidos, como colegios y puestos de salud.

Según datos de la Organización No Gubernamental Foro Penal, luego de los comicios se produjeron al menos 1.800 detenciones.

Maduro, quien asegura que las protestas fueron financiadas por la oposición para crear un caos en el país, dijo el mes pasado que si las autoridades habían cometido algún error en las capturas, le pedía a la Fiscalía revisar los casos.

Activistas y parientes de algunos detenidos han dicho que sus familiares no participaron en las manifestaciones o las miraban solo desde lejos, que algunos fueron detenidos en sus casas o en la calle cuando se desplazaban de forma particular y que han sufrido torturas en prisión.