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Las grandes tecnológicas vuelven a acudir a los tribunales para dirimir sus diferencias. En esta ocasión, el litigio es entre Apple y Ericsson. El creador del iPhone y el iPad ha denunciado al fabricante sueco de smartphones por considerar que los royalties que percibe por sus patentes de tecnología LTE (la cuarta generación de tecnologías de telefonía móvil, 4G) son demasiado elevados.
A su vez, Ericsson ha devuelto el golpe al gigante de la manzana presentando una denuncia contra él por utilizar licencias suyas que han expirado.
Según informa Reuters, dichas licencias, que permitían a Apple utilizar en smarphones y tablet tecnología desarrollada por la empresa sueca, han expirado recientemente y, pese a las negociaciones mantenidas entre las partes, que se han prolongado dos años, no se ha alcanzado un acuerdo para renovarlas.
A este respecto, el responsable del área de propiedad intelectual de Ericsson, Kasim Alfalahi, ha señalado que "hemos intentado negociar un nuevo acuerdo y hemos llegado a la conclusión de que necesitábamos la ayuda de un tercero", en referencia a su decisión de acudir a los tribunales.
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La empresa evalúa que una transacción de este tipo enfrentaría un escrutinio regulatorio intenso, dadas las implicaciones en competencia y concentración de mercado
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