MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
Uzbekistán, Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudí, Noruega y Estonia ocuparon los cinco primeros lugares en el Safety Perceptions Index
En el índice de percepción de seguridad global realizado por Lloyd’s Register Foundation y Institute for Economics & Peace, IEP, los países de Asia central obtuvieron los resultados más favorables ubicando varios países en los primeros lugares.
Uzbekistán, Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudí ocuparon los tres primeros lugares, respectivamente. Sin embargo, el informe destacó que de acuerdo con analistas, el resultado se debe en parte a que los ciudadanos de estos países tienden a reportar niveles más bajos de daños sufridos.
Para determinar la clasificación de los países, se evaluó la percepción de encuestas que preguntaban sobre las preocupaciones y experiencias de daños en cinco ámbitos: alimentos y agua, delitos violentos, condiciones climáticas extremas, salud mental y seguridad en el lugar de trabajo.
En cuarto lugar está Noruega y es seguido por Estonia, Singapur, Islandia, Suecia, China y Dinamarca para completar el top 10.Siendo, a su vez, los países europeos democracias plenas.
Colombia está en el puesto 88, compartido con Irak, en un listado de 121 países evaluados. Si se ve solo las posiciones que ocuparon los países de América, Colombia está de 12 entre 19 evaluados, entre los que están por debajo de él está México, Ecuador, Venezuela y Perú (en el puesto 93 general).
El IEP indicó que la relevancia económica de ocupar un buen lugar en el índice de seguridad es que significa un factor crucial para tener un clima de inversión favorable y estable.
Solo en intereses, las naciones en desarrollo pagaron US$415.000 millones, recursos que dejaron de destinarse a servicios esenciales como educación, salud primaria o infraestructura básica
El índice califica el riesgo político en una escala de 0 a 100, donde 100 representa el riesgo máximo y el peligro inminente de colapso
Los niveles de empleo se mantuvieron prácticamente sin cambios, como consecuencia de la reticencia de las empresas a contratar
