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Luis Carlos Reyes, director de la Dian, afirmó que la reforma se alinea con la Constitución de 1991 y cumple con ella en la medida en que será debatida en el Congreso de la República
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El presidente de la Comisión Tercera del Senado y coordinador de la reforma aseguró que las modificaciones habrían recortado el monto
El coordinador de la reforma tributaria y presidente de la Comisión Tercera del Senado, Gustavo Bolívar, aseguró que el proyecto ya no recaudaría $25 billones, como aspiraba el Gobierno, sino $20 billones, con las modificaciones que se la han venido haciendo al articulado.
"Hasta ayer, cuando se terminó la reunión de las comisiones conjuntas terceras de Senado y Cámara, la reforma ya iba en $20 billones, porque cada sector ha pedido que le bajen un poquito y hemos consensuado bastante y escuchado a todos los gremios. Pero si se mantiene la no deducción a las regalías en el sector de hidrocarburos, se subiría nuevamente a $23 billones. La intención es hacer una reforma tributaria lo más democrática posible", dijo el congresista en Blu Radio.
El Ministerio de Hacienda y los ponentes de la reforma tributaria sostuvieron una nueva reunión ayer para llegar a más acuerdos sobre el articulado, luego de las modificaciones que se le hicieron la semana pasada a los dividendos y a las ganancias ocasionales.
A su salida, el mismo ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, también reconoció que el recaudo sí será menor a los $25 billones que proyectaban para el próximo año, pero no especificó cuánto. "Será de un poco menos de $25 billones, inicialmente, pero llegando a esa meta en el cuarto año. Se recaudarán $50 billones con los controles a la evasión", aseguró Ocampo, quien agregó que habrá cárcel para los evasores.
Impuesto al carbono
Uno de los puntos más polémicos que ha tenido el Ministerio de Hacienda, tiene que ver con los nuevos impuestos para las industria extractivas como el petróleo y el carbón.
El ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, anunció que se le hizo una modificación a la fórmula como se van a gravar las exportaciones extraordinarias, es decir, cuando haya bonanza de estos commodities por sus altos precios en el mercado internacional.
El proyecto inicial que se radicó en el Congreso proponía que las regalías no fueran deducibles de la
depuración del impuesto de renta para las empresas petroleras y carboníferas. Pero los ponentes y el Gobierno acordaron modificar este artículo y cambiar la no deducibilidad por cinco puntos extra de impuesto de renta.
Esto quiere decir, que las compañías que se dediquen a la explotación del subsuelo del Estado no tendrán la tarifa de 35% del régimen simple, sino que se les aumentaría a 40%.
Pero este detalle parece no estar del todo acordado, ya que el senador Bolívar reveló que el presidente de Gustavo Petro está empeñado en que sí se elimine este beneficio para las petroleras y carboníferas, por lo que seguirían faltando ajustes.
Así mismo, habrá una nueva fórmula para los impuestos a las exportaciones. El proyecto original proponía que se gravara con un impuesto de 10% a las exportaciones de carbón y petróleo sobre los ingresos obtenidos cuando cada producto superara un determinado precio. Ese umbral estaba fijado en US$87 por tonelada de carbón y US$48 por barril de petróleo.
En la reunión de ayer se definió que esta base sea más alta y se tomará como referente el precio promedio de los últimos 20 años, pero el impuesto también subirá a 20%. El ministro Ocampo aseguró que en el caso del petróleo, el precio base será de US$71, pero no dio detalles del precio del carbón, aunque seguirá arriba de los US$80.
Bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados
En el caso de las bebidas con alto contenido en azúcar, el jefe de la cartera económica dijo que se permitirá, por un par de años y de manera transitoria, un porcentaje más alto del endulzante mientras se aplican las nuevas tarifas.
A las bebidas que contengan menos de seis gramos de azúcar por cada 100 mililitros no se les aplicará este impuesto saludable, pero las que tengan entre 6g y 10g tendrían que pagar una tarifa de $18 por cada 100 mililitros y las que tengan más de 10 gramos de azúcar pagarían $35.
La propuesta inicial contemplaba que las bebidas que no iban a pagar el impuesto adicional eran las que contenían menos de cuatro gramos de azúcar. La tarifa de $18 empezaría a aplicar para las que tengan entre 4g y 8g y las que tengan más de ocho gramos de azúcar pagarían $35.
Esta última fórmula sigue en pie, pero no se impondría desde el próximo año, sino después de 2025 con las tarifas transitorias ya mencionadas.
En cuanto a los alimentos ultraprocesados, la tarifa de 10% sobre el precio de venta se mantiene por ahora, pero solo aplicaría para los grandes productores. Según el ministro José Antonio Ocampo, las panaderías y productores pequeños estarán exentos de pagar este gravamen, aunque no queda claro cómo se hará el seguimiento.
Sistema financiero
El articulado radicado por el Ministerio de Hacienda también contemplaba dejar de manera permanente la sobretasa de 3% a las instituciones financieras. Por cuenta de la pandemia y debido al buen desempeño de este sector, el Gobierno anterior fijó esta tarifa adicional para el sistema financiero para ayudar a los más perjudicados por la crisis económica y social.
La medida iba a ser transitoria y las instituciones financieras están pagando una tarifa de renta de 38% por este motivo, pero la reforma tributaria proponía que fuera permanente.
Ahora se le ha hecho otra modificación. Según el ministro de Hacienda, los ponentes propusieron elevar esta sobretasa en cinco puntos porcentuales, es decir, que la tarifa de renta les subiría a 40%. Aunque todavía no queda claro si será permanente o transitoria.
Impuesto al patrimonio
La reforma tributaria también contemplaba establecer un impuesto permanente al patrimonio de 1%, con un esquema de tarifas marginales en función del valor del patrimonio, que se iba a cobrar a partir de patrimonios de $3.000 millones.
Pero la nueva propuesta en este caso plantea una tarifa adicional para patrimonios de más de $10.000 millones, que es de 1,5%. Pero habrá un periodo de cuatro años en el que se actualizará el valor de las propiedades, por lo que el recaudo sería menor en los primeros años.
La ponencia para el primer debate se presentaría la próxima semana, la primera de octubre, según las cuentas del Ministerio de Hacienda. Para lo que resta de esta semana se mantendrán más reuniones entre el Gobierno y los ponentes de la reforma.
La principal modificación es que se tomará el precio promedio de los últimos 10 años ajustado a la inflación de Estados Unidos
Martín Acero, socio de PPU, explicó que si bien la inversión social podría reducir la pobreza, hay puntos que son "preocupantes"
Quedaron definidos los impuestos más importantes del nuevo articulado, una vez se aprobó la semana pasada el texto tanto en la Cámara como en el Senado de la República
