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Las empresas de minería y metales se enfrentan a una variedad cada vez mayor de desafíos, desde mercados volátiles y una competencia más dura hasta el cumplimiento normativo y la descarbonización.
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Entre las dos compañías produjeron 52 millones de toneladas de carbón en 2021. Para este año, buscan aumentar el suministro
El sector carbonífero de Colombia tiene la meta de aumentar los niveles de producción en 2022 para las tres clases del mineral: térmico, metalúrgico y el derivado del metalúrgico, el coque. De las 60 millones de toneladas generadas en 2021, más de 50 millones fueron de carbón térmico, el tipo de carbón más producido en el país.
En este sentido, Drummond y Cerrejón son las empresas que ostentan 87% del total del mercado nacional de este mineral, con una producción de 29,2 y 23,4 millones de toneladas, respectivamente.
Claudia Bejarano, presidenta de Cerrejón, atribuyó el buen resultado de la compañía a la adquisición de Cerrejón por parte de Glencore, lo que ha permitido recuperar rápidamente el ritmo de la operación, dando como resultado un aumento de 89% en la producción frente a los dos primeros años de la pandemia.
A su turno, José Miguel Linares, presidente de Drummond, puntualizó que el sector viene de un periodo de retos y dificultades; sin embargo, la compañía minera logró ubicarse por sexto año consecutivo como la mayor productora y exportadora de carbón térmico en Colombia.
Como propósito común, las dos empresas buscarán aumentar los niveles de producción a raíz del incremento en los precios internacionales del carbón, lo que dejará, sin duda, un mayor aporte a las regalías y a las contraprestaciones sociales.
El objetivo de incrementar la producción tiene lugar debido al aumento de la demanda del carbón, tanto térmico como metalúrgico, como energético, pues debido a los problemas de suministro y el aumento en el costo de combustibles como el gas, se ha evidenciado un aumento en la demanda por parte de las industrias como las térmicas y las siderúrgicas.
Muestra de esta situación es la alerta de la Asociación Nacional de Empresas Generadoras (Andeg) frente a la escasez de carbón para la generación térmica, dada la crisis energética en las plantas de generación. Alejandro Castañeda, director ejecutivo de la Andeg, expresó que los jugadores del sector del carbón serán relevantes para la confiabilidad del sistema.
Dado el nivel de demanda nacional e internacional, desde la mirada gremial, Carlos Cante, presidente de Fenalcarbon, explicó que son aproximadamente cinco millones de toneladas de carbón térmico las que abastecen a las plantas térmicas de generación; también, cerca de tres millones de toneladas sirven de insumo para la industria cementera, ladrillera, textilera, entre otras. Además, un estimado de seis millones de toneladas son carbón metalúrgico, que se consume fundamentalmente en la industria de coquización.
En total, el consumo interno nacional totaliza cerca de 14 millones de toneladas anuales, según datos del gremio.
“Hemos venido apoyando una estrategia para garantizar abastecimiento suficiente en el interior del país, con los productores de Córdoba, y respaldar el consumo nacional”
“Este año será positivo para el sector minero, pues será un periodo de estabilización y de más oportunidades para los exploradores, en medio de la transición energética”
“Lo que estamos viendo en estos momentos con los altos precios internacionales del carbón es que mucho de ese carbón, si no la mayoría, se está utilizando para exportación y empezamos a ver una escasez en el mercado nacional que genera unos riesgos en la generación térmica. Los industriales están buscando con afán carbones que no encuentran porque se están utilizando fundamentalmente para exportación”, puntualizó Cante.
La atención del mercado también está concentrada en los títulos de La Jagua y Calenturitas, ya que el pasado 4 de febrero de 2021, las empresas pertenecientes a Grupo Prodeco presentaron su renuncia a los contratos mineros para operar estos nodos productivos, dando inicio al proceso de devolución de los títulos a la República de Colombia a través de la Agencia Nacional de Minería (ANM).
Dichos títulos cobran relevancia debido a que la operación en estas minas generaba entre 12 y 15 millones de toneladas anuales de carbón térmico a la Nación.
Sin embargo, pese a la escasez en el suministro nacional, el buen momento de los precios internacionales de esta materia prima permite predecir un mayor aporte a regalías, que para 2021 totalizaron US$491,2 millones en contraprestación.
Así lo afirmó Claudia Navas, analista del sector minero de Control Risks, quien agregó que esto se reflejará en mayores incentivos para los inversionistas nacionales e internacionales.
Actualmente, de acuerdo con los datos de la ANM, hay 1.774 títulos mineros con vocación de carbón; 172 se encuentran en etapa de exploración, 169 en construcción y montaje, y 1.433 en explotación. Todos los títulos suman un total de 1,12 millones de hectáreas en el territorio.
Las mayores productoras de coque nacional
El mercado de carbón tiene un segmento muy importante: el del coque, que es un derivado del carbón metalúrgico, utilizado como comburente en industrias como la siderúrgica, debido a su capacidad calorífica y de entalpía.
En Colombia, Milpa, Carbomax, Carbocoque, Coquecol, Excomin y Carbones Andinos, son las compañías que más producen este material resultante de la destilación del carbón bituminoso. Para este año, estas unidades productivas esperan superar la meta de 4,5 millones de toneladas en producción, lo que sería un nuevo hito para la industria.
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