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Por evidencias de que las elecciones para la junta directiva de la Cámara de Comercio de Barranquilla (CCB), celebradas el pasado 29 de agosto, pudieron haber sido manipuladas nuevamente, la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) inició el trámite de impugnación del proceso.
Según el organismo, el pago de las renovaciones de las matrículas mercantiles que la Fundación Mario Santo Domingo hizo a cientos de votantes es la prueba clave que demostraría el hecho.
Las denuncias fueron hechas ante la Superindustria por el comerciante Alejandro Duarte, miembro de la Unión de Comerciantes (Undeco) y quien había sido parte de la junta de la cámara. Duarte señaló que la depuración del censo electoral que se hizo con motivo de las irregularidades encontradas el año pasado en el mismo proceso no se hizo de la manera correcta.
Por eso, la SIC ordenó que se adjuntaran varias pruebas sobre el proceso, que incluyen la relación de créditos otorgados por la Fundación a comerciantes para la formalización de sus inscripciones, así como las comunicaciones entre funcionarios de esta en las que se refieren al tema. Además de esto, se entregará testimonios de empleados de la Fundación, las listas de los resultados de las votaciones por mesas y notas de prensa en las que se hacen las denuncias.
Las elecciones que serían impugnadas se llevaron a cabo después de que la SIC encontró que el 5 de julio de 2012 se había elegido una junta directiva a través de la creación de miles de Sociedades Anónimas Simplificadas (SAS), pues sus miembros entregaran sus votos.
Después de un proceso de varios meses, en el que se convocó a dos elecciones que se cancelaron a última hora, el 29 de agosto pasado se pudo adelantar el proceso que hoy es cuestionado por la SIC.
En la jornada electoral se ha evidenciado una puja de poderes entre dos sectores del empresariado barranquillero, en el que se han visto envueltos personajes como Samuel Tcherassi, representante de EPK, y Pablo Gabriel Obregón, presidente de la Fundación.
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