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Air-e detalló que esta práctica pone en riesgo la prestación del servicio de energía.
Air-e determinó que esta práctica pone en riesgo la prestación del servicio público de energía y también la seguridad de los usuarios
La empresa de servicios públicos del Caribe, Air-e, expresó que su personal técnico detectó 418 transformadores instalados ilegalmente en 2024; los equipos se hallaron en Magdalena, Atlántico y La Guajira.
La compañía intervenida detalló que estos equipos alimentaban redes a clientes residenciales, comerciales e industriales, lo que generó pérdidas económicas por casi $8.600 millones anuales, que a su vez representaron $715 millones mensuales y más de $23 millones diarios.
La organización detalló que esta práctica pone en riesgo la prestación del servicio de energía, y también la seguridad de los usuarios que reciben esta energía, ya que, los equipos no estaban registrados en la empresa.
Y es que de los 418 equipos, 210 se detectaron en los últimos cuatro meses, lo que para Air-e reveló el complejo panorama de usuarios que insisten en manipular el servicio de energía para evadir el pago.
Air-e aseguró que la energía hurtada fue de 9,8 gigavatios hora/mes, cifra suficiente para suministrar energía eléctrica a casi 3.300 familias de los estratos más vulnerables en capitales como Barranquilla.
Los municipios con mayores hallazgos de equipos fueron Santo Tomás, Tubará y Sabanagrande en Atlántico, y Zona Bananera ubicado en Magdalena; los dispositivos no tenían el certificado Retie (Reglamento Técnico de Instalaciones Eléctricas).
La organización concluyó que también se descubrió a casi 13.500 usuarios que accedían al servicio de forma ilegal, es decir,se conectaban a las redes sin tener un contrato, con lo cual recibían el servicio sin recibir factura de cobro.
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