Hewlett Packard deja Ruta N, pero lo amarra un contrato

Los resultados no fueron los mejores para la multinacional, según un artículo del portal Nearshore Americas que citó a una fuente anónima y del cual, se ha replicado en redes sociales para calificar de fracaso este matrimonio estratégico.

Por eso El Colombiano se dio a la tarea de averiguar la realidad frente al asunto, que efectivamente muestra cuatro pisos desocupados en la torre HP de Ruta N y sobre todo, lo que se anunció hace casi 5 años con tanta parafernalia, ahora parece que se desocupa silenciosamente.

Retrospectiva

Era el 13 julio de 2010 cuando Gerard Brossard, el entonces vicepresidente de Estrategia y Desarrollo Corporativo de la multinacional americana, dijo en Medellín en la ceremonia donde se colocó la primera piedra para la construcción del complejo Ruta N, que en la ciudad “encontramos confianza, respeto, pasión por los clientes, trabajo en equipo, velocidad, logros, innovación significativa y el poder hacer negocios de manera integral”.

Con bombos y platillos el entonces presidente de la República, Álvaro Uribe, habló de una inversión de US$35 millones en el complejo, que HP ocuparía toda una torre de 8 pisos y generaría 1.000 puestos de trabajo.

Había que resonar la noticia porque se trataba de la llegada de una multinacional con presencia en 170 países, que puso sus ojos en Medellín para su operación en Latinoamérica. Esta fue la apuesta de HP por una nueva Medellín, que se logró por gestión del gobierno Uribe y Condoleeza Rice, exsecretaria de Estado de E.U., quien era asesora externa de Hewlett Packard en esa época.

Otro que habló en la misma ceremonia fue el entonces ministro de Comercio, Industria y Turismo, Luis Guillermo Plata, quien le contó a El Colombiano en ese momento que “hace cuatro meses estaba en Panamá cuando recibí una llamada del presidente Uribe, en la que me pedía que llamara urgente a Condoleeza Rice. La llamé y me contó que HP quería establecerse en Latinoamérica y que Colombia era uno de sus candidatos”.

Fueron varios los protagonistas de la rimbombante ceremonia, entre ellos el alcalde de Medellín, Alonso Salazar, quien dijo que todo era un trabajo en equipo logrado entre EPM, UNE, Eafit, Proexport (ahora Procolombia) y la Agencia de Cooperación e Inversión de Medellín (ACI).

Acuerdo real

Casi 5 años después de esta importante llegada, la ciudad se quedó esperando la creación de 1.000 puestos de trabajo que nunca llegaron, solo una silenciosa operación de HP que comenzó en Eafit mientras les entregaban la torre en Ruta N y que se redujo a un contrato de arrendamiento por 10 años.

Sin embargo, una decisión internacional de recomponer la operación en el mundo, tal y como lo argumentó a El Colombiano Blair Hinderliter, vocero oficial de HP para Latinoamérica, cuando dijo que desde EE.UU. que “estos cambios son parte de una estrategia de toda la empresa en promover equipos más grandes, dinámicos y recursos concentrados con menos posiciones en el mundo manteniendo una colaboración cercana”.

Pero además de este argumento oficial de la compañía, también hay que revisar las políticas internas en Colombia y específicamente en Medellín. Siempre es sana es autorreflexión.

Según el rector de la Universidad del Rosario, José Manuel Restrepo, vale la pena cuestionarse hasta qué punto la responsabilidad es del país, donde “la innovación todavía es un discurso a nivel nacional, quizá el más adelantado es Medellín, pero la rentabilidad no es suficiente, a esto se suma que no encuentra certeza jurídica, ni tributaria para hacer negocios, o porque el talento humano no cruza con la demanda del mercado”.

Por eso primero hay que ordenar la casa en esos temas, cambiando el actual entorno que es cada vez menos atractivo. En esta misma línea se muestra el decano de Economía de la Universidad de Antioquia, Ramón Javier Mesa, quien afirma que para no repetir la historia con otras grandes empresas que lleguen a Colombia, se debe ser aterrizar más las promesas de éxito, acordes con la tasa de rentabilidad proyectada.

“Esto se debe revisar bien porque hacer empresa en Colombia no es fácil, los asuntos tributarios le pegan duro a las empresas y por eso los gobiernos nacional y local deben buscar nuevas estrategias que brinden más estabilidad a las empresas”.

La versión oficial

El director ejecutivo de Ruta N, Juan Camilo Quintero, dijo que con HP solo hay dos documentos firmados, “uno de alquiler por 10 años y un memorando de entendimiento no vinculante, de que si necesitan apoyo se lo podemos brindar, pero nunca hubo un compromiso de creación de 1.000 empleos. Esto lo revisé cuando llegué a la Junta de Ruta N en 2012”.

Según parece, el tal ‘milagro de empleo’ nunca se pactó en los contratos, es más, de parte de la ciudad y la misma corporación se le ha cumplido a HP. “Ellos no se han ido, siguen ocupando todo un piso, están recomponiendo la forma de operar en ciudades intermedias a nivel global y por eso son los cambios”, agrega Quintero.

El asunto es que con este tipo de organizaciones la confidencialidad es extrema. Así digan que no se ha ido, HP ya no figura en el papel de los contratos con Ruta N, este reacomodamiento global de la compañía terceriza las operaciones intermedias en el mundo, por lo que en Medellín los representa Americas BPS, empresa de origen colombiano.

“Siguen con el mismo BPO de asistencia técnica, tecnológica y ventas tecnológicas. El contrato se había firmado a 10 años, había que honrarlo y por eso nos pidieron que si se podía subarrendar, tal y como lo hicieron con Holcim”, destacó el director ejecutivo de Ruta N.

La razón para Ruta N es clara, HP a raíz de que no estaban creciendo en América latina han tenido que recomponer el negocio y por eso en Ruta N pidieron subarrendar tres pisos a Holcim.

Nuevas empresas

En medio de este entorno cambiante, con exigencias para la ciudad y con el fin de revisarse a fondo qué pudo fallar con HP y que termina siendo una mala señal para nuevas multinacionales que quieran llegar a la ciudad, es que se liberó un espacio para que lleguen nuevas empresas a Ruta N, por lo que en 15 días se anunciará el arribo de 10 empresas, aunque aún no se revelan sus nombres.

“Una de ellas ya la aprobó el board de Colombia y se espera la aprobación del board a nivel internacional de la compañía. Esperamos estar completos en ocho meses, para mantener los espacios de coworking”, agregó Quintero.

Sin embargo, no se puede desconocer que HP en su momento generó confianza en la ciudad, le dio un ‘empuje’ a Ruta N pero la corporación ya alzó vuelo por sí sola, al punto que están en conversaciones de montar ecosistemas de innovación similares en Chile, Perú, Ecuador y Panamá. Además, con Colciencias ya se firmó contrato para montar programas de innovación en cuatro ciudades de Colombia, entre ellas Bogotá, Bucaramanga y Cali.

Están trascendiendo el tema innovador, porque en esa mayor oferta empresarial reúnen energía, animación digital, nanosatélites, cirugías maxilofaciales, pagos por compensación, entre otros, heterogeneidad que permite que haya una dinámica mayor de innovación.

Por eso la apuesta es clara, contar con más compañías que se muevan rápidamente, sean dinámicas y de mayor trasferencia de conocimiento.

Tienen listas varias compañías para que se alojen en Ruta N, que en total generan 101 empleos. La apuesta es que antes de 8 meses hayan llegado más de 50 empresas, incluso es probable que lleguen dos empresas alemanas.

El área de Landing de Ruta N ya se quedó corta, por lo que se va a construir un complejo nuevo, media cuadra hacia el sur de la sede actual. “Pronto saldrá el trámite de licitación para su construcción, donde estarán importantes empresas, universidades y otros importantes actores del ecosistema para que el distrito innovador de Medellín converja mejor”, explicó por su parte el vicealcalde de ciencia, tecnología e innovación (CTi) de Medellín, Luis Felipe Hoyos Vieira.

El costo del terreno fue de $8.200 millones y se proyecta que el costo total de la edificación sea cercano a los $80.000 millones.