Google apuesta por recortar los costes

Porat, que ya introdujo recortes del gasto cuando desempeñaba el mismo cargo en Morgan Stanley, está llevando a cabo una auditoría interna que examina costes, ingresos y sistemas contables. Con esta estrategia, la ejecutiva intenta dejar su impronta en una empresa que, aunque ha ganado estabilidad, es ahora mucho más compleja que hace años.

Google publicará hoy un informe actualizado sobre sus gastos, coincidiendo con la presentación de resultados del segundo trimestre. Se prevé además que Porat participe en su primera teleconferencia con analistas de Google.

El indicio más claro de la nueva política está en que Google contrató a 1.819 empleados en el primer trimestre, lo que supone un aumento de su plantilla, que ya asciende a 55.419 personas. Se trata del incremento más pequeño desde el último trimestre de 2013. El año pasado sumó un promedio de 2.435 empleados por trimestre.

Durante muchos años, Google dio por hecho que podía contratar empleados todos los años. Ahora, los ejecutivos de la empresa deciden qué grupos pueden incorporar personal, en función de las prioridades estratégicas. Desde finales del año pasado, muchos equipos de Google han tenido que entregar planes describiendo cuántos empleados más generarán objetivos de negocios concretos, como más ingresos o más usuarios.

Limitación de contrataciones

El año pasado, Google limitó las contrataciones en su división de la red social Google+, mientras que la división Nest especializada en hogares conectados tuvo más libertad para crecer.

Según un ex empleado de Google, en el marketing publicitario, las nuevas contrataciones dependen de la generación de ingresos. Esta persona indicó que debido a los cambios era más difícil conseguir aprobación de planes de contrataciones en 2015 que en 2014.

Algunos empleados mencionan otros ejemplos de recortes, aunque no hay que olvidar que las oficinas de Google ofrecen infinidad de servicios comparadas con otras compañías. Ahora, las partidas de gastos de viajes, compras y eventos necesitan más justificaciones que en años anteriores.

Aunque Google no tiene previsto recortar empleos, dado su nivel de crecimiento, el control del gasto es un cambio significativo para una empresa que durante mucho tiempo favoreció la expansión.

"Google está quitando el pie del acelerador", dice Carlos Kirjner, un analista de Bernstein Research. "No creo que la empresa haya cambiado su filosofía o su estrategia. Sólo lo ha ajustado", añade.

Balance financiero

En años anteriores, el rápido crecimiento de los ingresos redujo la necesidad de controlar los gastos tan de cerca. Pero el crecimiento se ralentizó mientras que los gastos siguieron en aumento.

Los ingresos de Google crecieron un 19% en 2014, frente al 21% en 2013, el 22% de 2012 y el 29% de 2011. Sin embargo, los gastos operativos crecieron un 31% el año pasado, según S&P Capital IQ; el gasto en I+D aumentó un 38%. El resultado: el margen de beneficios operativos cayó del 38% en 2011 al 32%, según Goldman Sachs.

Además, las acciones de Google han registrado una caída del 3% en el último año, mientras que las de sus competidores Apple y Facebook aumentaron más del 30%.

En los últimos meses, ejecutivos de Google han intentado calmar los ánimos. En una reunión a principios de diciembre con importantes accionistas, el consejero delegado, Larry Page, explicó que Google entendía la necesidad de equilibrar las inversiones a largo plazo y que asumía el riesgo de que la caída del precio de las acciones afectara a la moral de los empleados y a las contrataciones. El mensaje fue que Google será de ahora en adelante, más disciplinada. Page indicó además que Berkshire Hathaway se ha convertido en su modelo de cómo gestionar una empresa grande y compleja.