Es momento de consentir a la iguana

Y como si esto fuera poco, a esta hoguera se le adicionaron combustibles como la decisión de la Opep de mantener su producción en 31 millones de barriles diarios, la de Estados Unidos de iniciar la exportación del recurso, y la del levantamiento de las sanciones económicas a Irán, país que colocará 500.000 barriles en el mercado en el corto plazo y un millón en el mediano.

Sin embargo, frente a este panorama internacional es poco o nada lo que podamos hacer, pues a pesar de tener y vender petróleo, no somos un país petrolero, tan solo representamos 1% de la producción mundial, por lo cual somos tomadores de precios y no referentes como Arabia Saudita o nuestro vecino Venezuela.

Es por ello que debemos trabajar de manera interna y construir soluciones conjuntas que nos permitan sortear este escenario de precios bajos, y de esta manera mitigar las consecuencias que han traído para el país, la economía, los ingresos fiscales y la industria.

Ecopetrol, la más importante empresa de Colombia, está pasando apuros en estos momentos, la continuidad en los precios bajos le hará replantear su plan de inversiones que fue calculado para este 2016 bajo una base de US$50 el barril, cotización que diversos analistas no prevén para este año.

Si la empresa ajusta el presupuesto, los recursos destinados para producción y exploración se verán afectados y por ende, las exportaciones, así como los ingresos fiscales que la compañía entrega a la nación.

No podemos olvidar todo lo que Ecopetrol le ha aportado al país y a su desarrollo en los últimos diez años, tan solo en PIB ha participado en promedio con 7%, en regalías, con lo cual se han financiado obras de infraestructura y programas sociales ha entregado $57,2 billones, en impuestos le ha entregado a la nación $43,7 billones y en dividendos unos $58,6 billones.

Nada despreciables estas cifras, las cuales demuestran lo que ha sido Ecopetrol para Colombia ¡un motor de desarrollo!, es por ello que tras haberle dado tanto al país, es el momento de retribuirle, de darle la mano en este escenario duro, por lo que llegó el tiempo de consentir a la iguana, y qué mejor manera de hacerlo que inyectándole recursos.

En este sentido el Gobierno, a través de financiación directa o gestionando un préstamo internacional o de banca multilateral, debe inyectarle recursos a Ecopetrol para que inicie un programa agresivo de exploración, lo cual le asegure no solo un crecimiento futuro, sino una tranquilidad para que en el momento de una recuperación de precios, se tenga el petróleo suficiente para aprovechar esa producción y obtener los recursos para su desarrollo.

No olvidemos que tenemos reservas por seis años y la actividad petrolera es de mediano y largo plazo, por lo que inversiones e inyección de capital en este momento para actividades como exploración, nos asegurará producción futura e incorporación de reservas. Es el momento de pensar y dirigir nuestra mirada hacia Ecopetrol, no podemos ser indiferentes en su presente y pequeños con su futuro.