Epsa invirtió $8.749 millones en nueva subestación de Palmira

Con una inversión de $8.749 millones, la Empresa de Energía del Pacífico (Epsa) inauguró una subestación en zona rural de Palmira, que respalda el sistema de distribución de energía en esta zona, donde se encuentra el aeropuerto internacional Alfonso Bonilla Aragón (que está desarrollando un proyecto de ampliación), el estadio del Deportivo Cali y varias zonas francas.

La concentración de presencia empresarial fue lo que hizo que Epsa decidiera realizar esta obra, que hace parte del plan de inversión de la compañía para 2013, el cual asciende a $101.000 millones. De este total, el 60% está destinado al programa de expansión y crecimiento de las redes de distribución, pues el objetivo de la firma es atender la nueva demanda de energía en la región. El 40% restante irá a planes de mantenimiento y reposición de los activos con los que cuenta.

Dentro de las iniciativas de expansión de Epsa también está el proyecto de arquitectura de red, que permite tener redes flexibles y el desarrollo de infraestructura eléctrica para atender a cerca de 18.000 nuevos clientes.

La nueva subestación consta de tres niveles de tensión, el primero de 115.000 voltios, donde se enlazan las líneas de interconexión con el sistema de distribución regional, en las subestaciones Guachal y Sucromiles; y el de transformación de 115.000 a 34.500 voltios, que permite realizar la conexión del sistema de distribución regional al sistema de distribución local, a través de las subestaciones La Dolores, Santa Bárbara y Termo Yumbo.

Por último, el sistema de transformación de 34.500 a 13.200 voltios permite alimentar residencias y pequeñas industrias, por medio de los circuitos Caucaseco, Guanabanal, y Palmaseca.

Sentido social
En el marco de la política de sostenibilidad, la empresa construyó las redes de baja tensión para darles servicio a un grupo de familias de la vereda La Unión, perteneciente al corregimiento de Palmaseca, generando durante la construcción de la subestación alrededor de 29 puestos de trabajo directos, que correspondió al 75% de la mano de obra contratada.

Además, la compañía entregó 444 kits escolares a estudiantes de preescolar y primaria de la Institución Educativa Sebastián de Belalcázar, sede José María Vivas Balcázar de Cali, y donó implementos que benefician a la comunidad y promueven su desarrollo.