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El año pasado, la Isla registró una ocupación de 75%, siendo uno de los destinos más visitados durante la temporada de reflexión
San Andrés vivió su calvario durante la Semana Santa con una ocupación de 30% tras la salida de las aerolíneas de bajo costo Ultra Air y Viva Air, que sellaron un marzo negro para el sector turístico y del transporte aéreo.
Paula Cortés Calle, presidente de la Asociación Colombiana de Agencias de Viajes y Turismo (Anato), expresó que la salida de las dos ‘low cost’ fue drámtica para el sector turístico. “La ocupación hotelera fue de 30% en San Andrés, la afectación sí fue muy grande para la Isla con la salida de Ultra y Viva, que lamentablemente se da semanas antes de una de las temporadas más altas del año”, manifestó en RCN Noticias.
La situación ya se advertía desde enero de este año cuando empezó a disminuir la ocupación en el archipiélago. “Cuando cesan por completo las operaciones con Viva Air, nos damos cuenta que otros destinos también manifiestan esos impactos como San Marta y Medellín”, agregó José Andrés Duarte, presidente nacional de Cotelco.
En 2022, San Andrés registró una ocupación de 75%, de acuerdo con información de Cotelco, durante la misma temporada. Y para 2019, la cifra superaba 50%. Por lo que se estaría hablando de una caída de 55%. Si bien, aún no hay una cifra de las pérdidas, se estima que esta ronde en $80.000 millones.
El ministro de Transporte, Guillermo Reyes, que estuvo el viernes y sábado pasado recorriendo la Isla constató que la ocupación osciló entre 20% y 30%. “Tuve una reunión con hoteleros y caminé las calles de la Isla, no puedo decir que no había nadie, había gente, pero no la que se esperaba. Normalmente, la ocupación en San Andrés supera 90%”, precisó. El ministro confirmó que la disminución se debe a la salida de las aerolíneas Ultra Air y Viva Air, que tenía varios vuelos desde diferentes destinos.
En promedio, según el presidente de Cotelco, operaban 33 vuelos diarios a la Isla. Con la salida de Viva Air, la primera ‘low cost’ en suspender su operación, la conectividad cayó a 14 vuelos diarios. “El impacto es la mitad de los pasajeros”, manifestó Duarte.
Viva Air, con 34 nacionales y 20% de la participación de mercado, operaba tres rutas con destino a San Andrés desde Medellín, Cali y Bogotá. Ultra Air, con 8% del mercado aéreo y 17 rutas nacionales, también operaba tres rutas al archiélago, en las que competía con la pionera en el modelo de bajo costo.
Otro de los destinos que se vio impactado fue Santa Marta, que presentó una disminución de 10% en su ocupación. Ultra Air tenía tres rutas con destino a la ciudad costeña desde Bogotá, Cali y Medellín. La ‘low cost’ que anunció su quiebra y suspensión de su operación el 29 de marzo tenía 14% de la participación de mercado en las rutas en las que operaba, lo que representó un golpe para el sector turístico.
La emergencia que hoy vive el sector hotelero y turístico a causa de la salida de las dos aerolíneas de bajo costo se advertía días antes de la Semana Mayor por el incremento de los tiquetes. Por ejemplo, a San Andrés aumentaron 46% tras la crisis del transporte aéreo. Entre el 31 de marzo y 10 de abril, después del archipiélago, Cartagena era la segunda ciudad que presentaba un mayor incremento de tiquetes, con un alza de 40%, seguida por Santa Marta, con 32%. Esto según datos registrados por Kayak.
El precio promedio de un tiquete a la isla para la temporada de Semana Santa estaba en $1,13 millones. El valor para Cartagena, estuvo $781.470 en promedio y, para Santa Marta, ascendió a $863.730. Cifras que se traducen en el impacto negativo que tuvo la ocupación en estas ciudades al términe de la temporada. Ante esto, el Gobierno Nacional estudia como medida la disminución del IVA a tiquetes y combustibles, que está en 19%, en zonas de interés como la Isla.
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