Cobertura en salud tiene tendencia creciente desde 1995, pasando de 29,2% a 99%

Durante el seminario organizado por Anif "El Futuro del Sistema de Salud" se expusieron los logros y retos del sector. El viceministro de Protección Social, Luis Alberto Martínez, inició su presentación asegurando que la cobertura en salud está a punto de llegar a 100%.

“No obstante, todavía hay oportunidades de mejora a nivel territorial”. Y añadió que hay territorios con una cobertura de 60% y otros en los que es de 113%, “esto hay que mejorarlo”.

El viceministro enumeró los factores por los cuales en este momento el sistema de salud es incompatible con la garantía de derecho. "Hay una débil autoridad sanitaria a nivel Nacional y territorial que delega a las fuerzas del mercado la dirección, organización, regulación, coordinación y la asignación de recursos para la atención en salud de los residentes".

Como segundo punto dijo que la segmentación de la población según su capacidad de pago van en contra de la universalidad del derechos humanos fundamentales. "Estos derechos no dependen de la capacidad de pago".

La fragmentación de la prestación de los servicios dijo que impedía la integralidad, "la ley 100 nos obliga a que cada uno de los prestadores públicos o privados son islas que compiten entre sí, es un sistema basado en las transacciones que despilfarra recursos y que facilitan la corrupción".

El director ejecutivo de Fedesarrollo, Luis Fernando Mejía, hizo hincapié en los principales retos para la Reforma a la Salud. "Primero, las desigualdades. A pesar del aumento en la cobertura y en la universalidad del acceso, siguen existiendo muchas desigualdades en materia de oferta, acceso, calidad y especialmente entre las zonas rurales y urbanas". También dijo que los recursos son insuficientes para financiar el derecho a la salud, pues los gastos superan los ingresos corrientes del sistema, con una acumulación de déficits anuales.

Añadió que hay un gasto creciente e inducido por la modalidad de "pagos por evento" y por la ausencia de suficientes incentivos para los prestadores de servicios, a la par que desconocen la eficiencia del gasto en términos de resultados en salud.

"Hay una debilidad en la estructura institucional y la gobernanza del sector, que se refleja en fallas de articulación entre las políticas y niveles de Gobierno, añadió.

En cuanto a los elementos que deberían incorporar a la reforma resaltó la necesidad de diseñar un programa para la integración de redes a nivel regional. Además, aseguró, se debe reglamentar e implementar el modelo de atención integral y el modelo de atención primaria en salud con enfoque diferencial en territorios.

A partir del diagnostico, propuso diseñar un programa de infraestructura y dotación de hospitales y, finalmente, diseñar los componentes de formación, gestión y ejercicio del talento humano en salud.

También aseguró que en el elemento de satisfacción "para el caso colombiano parece que hay una percepción bastante positiva en materia de atención". Añadió que la pregunta que se le hace a las personas es: cómo está el sistema y si el sistema de salud es bueno o es malo, con un 80 % de satisfacción, Colombia quedó por encima de Chile, Japón y de la media que está en 67%.