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El Ministerio de Comercio, Industria y Turismo publicó el fin de semana pasado en su página web un proyecto de decreto en el que se plantea la modificación del tope máximo de la franja de precios al azúcar que pasaría de 117% a 70% y tres años después a 40%.
Sin embargo, a pesar de la preocupación del sector productor y procesador de caña ante la medida, para los industriales la variación no es significativa, por lo que elaboraron su propia propuesta, 77 puntos porcentuales por debajo.
Pero no fueron los únicos, la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) también emitió un concepto en el que señala que un arancel inferior es afín a la promoción de la libre competencia. El superintendente, Pablo Felipe Robledo, aseguró que en los últimos ocho años, 94% de las importaciones de azúcar han ingresado con aranceles inferiores a 70%. “La medida es inútil, la variación tiene que ser muy superior para que tenga un efecto real”, dijo.
La SIC aconseja que el valor sea cercano a 25% o 30%, solo así se generará una presión competitiva para que baje el azúcar nacional.
Guillermo Trujillo, presidente del Comité Especial de Confitería y Chocolatería de la Andi, aseguró que actualmente a la industria cada tonelada de azúcar importada le cuesta $1,9 millones, “con el arancel de 15% que proponemos quedaría en $1,3 millones”. El vocero aseguró que en esta industria algunos productos son hasta 30% azúcar, siendo una de sus materias primas más importantes.
Un informe de Asocaña publicado por el diario El País de Cali, advierte que “si se desmontaran estos mecanismos, la industria de confitería y chocolatería se ahorraría 1,5% de sus costos, mientras que la azucarera perdería 100% de sus ingresos, que son de $4 billones al año para la región”.
El presidente del gremio, Luis Fernando Londoño, dijo en entrevista con WRadio que cuando el precio del azúcar cae los industriales no le trasladan el valor a los consumidores. “Los precios de los chocolates, por ejemplo, han crecido 163% en los últimos 15 años, tres veces más que el valor del azúcar”.
Sin embargo, de eso mismo acusan los industriales a los ingenios “los consumidores pagan actualmente por un kilo de azúcar $1.900, cuando con un arancel de 15% quedaría en $1.300”, dijo Trujillo. Incluso la ministra de Comercio, Cecilia Álvarez-Correa manifestó que los consumidores “no deben seguir subsidiando el azúcar a la industria productora”.
Mercado interno se queda con la mitad del azúcar
De acuerdo con cifras de Asocaña, los ingenios producen 2,2 millones de toneladas de azúcar cada año producto del procesamiento de 21,5 millones de toneladas de caña. Un cálculo aproximado de la Asociación Nacional de Empresarios, Andi, señala que el consumo interno es de 1,2 millones de toneladas de azúcar.
Cabe recordar que el Plan Vallejo (establecido en 1959) permite que se importen insumos como el azúcar sin arancel siempre y cuando se empleen en la producción de bienes de exportación. Sin embargo, la mayor parte de la fabricación se queda en el mercado local.
La opinión
Pablo Felipe Robledo
Superintendente de Industria y Comercio
“Rebajar los aranceles máximos de importación del azúcar a 70%, no tendrá un efecto real sobre el mercado. Es insuficiente”.
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