El nivel de exposición mediática mundial que le representan los Juegos Olímpicos de Londres a las marcas patrocinadoras provoca que muchas empresas se la jueguen toda por participar. Es así como este año, P&G le ganó el pulso a Johnson & Johnson como patrocinador oficial de los Olímpicos. Las dos marcas tuvieron su propia competencia, puesto que J&J eran los habituales patrocinadores, pero P&G pagó más para clasificar.