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A pesar de que la genética surgió alrededor de los años 1900, los avances científicos y tecnológicos han hecho que desde hace muy poco se haya comenzando a ver con mayor claridad verdaderos frutos. En este sentido, es el término de mejora genética el que mayor prevalece en el sector ganadero .
La mejora existe desde siempre, pues los ganaderos lo han hecho de forma intuitiva al comprender que había factores en los animales interesantes que se heredaban por sus crías. Es importante saber que la mejora genética se podría definir como un conjunto de acciones para conseguir que se incremente el valor de los caracteres productivos de interés, al pasar de una generación a otra.
Carlos Manrique Perdomo, profesor del área de mejoramiento animal del departamento de producción animal de la Universidad Nacional de Colombia, explicó el proceso. “Se deben identificar genéticamente los animales para poder seleccionarlos y así utilizarlos para apareamiento. Es decir, se debe estimar el efecto que tiene la genética en esos productos para no confundirlos con efectos no genéticos o de entorno”.
Hay que destacar las dos fases que habría que seguir. En primera instancia sería la selección, donde se eligen los reproductores que vayan a procrear, y el apareamiento, donde la carga genética seleccionada producirán la mejora deseada.
Para Juan Vicente Delgado Bermejo, profesor titular de genética de la Universidad de Córdoba, España, “los objetivos de selección son aspectos generales en los que queremos influir genéticamente para obtener una mayor rentabilidad de los animales por aumento de su productividad”.
Por su parte, Perdomo considera que se debe tener en cuenta para utilizar cierta genética, la verificación de la misma, “y que haya sido evaluada en un entorno similar al que tiene el ganadero, en factores como clima y prácticas de manejo y demás, pues eso le dará garantía de lograr el progreso esperado”.
Así, Bermejo desveló algunos factores que se pueden conseguir con esta práctica. “Por ejemplo, en la producción láctea, se puede lograr que los animales generen más leche, con un mejor contenido químico o con mayor calidad sanitaria”.
Se creó a la vaca Daisy, nuevo avance genético
En los últimos días se conoció una noticia que tuvo un gran impacto en el sector de la genética en general. Este es el caso de Daisy, una vaca clonada y creada en Nueva Zelanda por los investigadores del Instituto AgResearch, que ha sido modificada genéticamente y que gracias a la mejora, es capaz de producir leche, la cual elimina una proteína que suele causar reacciones alérgicas. En este sentido, se pone especialmente en relieve las posibilidades que hoy en día existen en el campo de la genética para crear nuevos e innovadores productos que ayuden a las personas. Aunque este experimento ha creado controversia entre los detractores de estas investigaciones y recelo sobre si el producto es realmente útil, muestra los beneficios que estas prácticas pueden generar.
La opinión
Carlos Manrique Perdomo
Profesor del dpto. de producción animal U. Nacional
“La genética de los animales se clasifica por raza, línea, especie o cruce, dependiendo del sistema de reproducción”.