Aumento en patentes colombianas no alcanza para competir

Colombia ha mejorado en su trabajo de presentación de patentes en los últimos años, pero aún se encuentra en gran desventaja frente a los países desarrollados.

El país incluso está en una mala posición si se le compara con otros suramericanos y esto está afectando la competitividad de las empresas. El problema, dicen los expertos, está tanto en la falta de inversión pública como en la carencia de las relaciones entre las empresas y la academia.

El registro de patentes -la constancia de originalidad en una invención o diseño que registra una personas- es una forma de medir el progreso de un país. No hay dudas que entre más avanzado el país, más patentes tendrá, pues no solo muestra qué tantas nuevas ideas tiene su gente, sino que reduce costos de producción y protege a las empresas en caso de algún problema legal.

Según el ranking de competitividad del Foro Económico Mundial, Colombia está en el puesto 64 entre 144 países examinados en cuanto a la cantidad de patentes que se presentan en relación con su población. Para este año, el FEM calcula que en Colombia se piden 1,1 patentes por cada millón de habitantes de acuerdo con algunos estándares internacionales.

Este dato, el cual significa un avance de 12 puestos en relación con el año anterior, nos pone detrás de México, Brasil, Chile, Costa Rica y Uruguay, pero por encima de Perú, Argentina y Venezuela.

Se ha mejorado en este tema, si se considera que hace un año se tenían solo 0,1 patentes por cada millón de habitantes y ahora la cifra se multiplicó.

Sin embargo, el número de patentes que se registran en el país sigue siendo muy bajo, si se hace una comparación entre las patentes de nacionales con las de extranjeros.

Según la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC), entidad encargada de aprobar las patentes a nivel nacional, en 2011 se hicieron 164 solicitudes de registro de patentes por invención y 138 por diseños industriales. De estas solo 31 fueron otorgadas por las primeras y 157 por las segundas.

El principal problema para estos números tan bajos es que no hay suficiente inversión, medida como parte del PIB, y es muy baja en relación con otros países. 'Los colombianos están haciendo buenos esfuerzos, pero en la medida en que haya más presupuesto para invertir se verá en un aumento de numero de solicitudes. Hasta el momento es solo el 0.2% del PIB. Si se llegara a niveles como Brasil, donde es de 1,5% del PIB o más, seguro se verían mejoras', dijo José Luis Salazar, director de Nuevas Creaciones de la SIC.

'En la medida en que la economía colombiana se fortalezca, crezca el empleo y la inversión extranjera seguramente vamos a ver un avance significativo en la presentación de patentes', sumó.

La SIC muestra que para 2012 la cifra ha aumentado mucho. Por ejemplo, hasta septiembre el número de patentes concedidas por inversión casi duplicaban las del año pasado. Pero en este mismo año, las patentes registradas por nacionales era solo el 10% de las solicitadas por extranjeros.

Pero una mayor inversión termina siendo inútil si no se logra convencer tanto a los empresarios como a las universidades de enfocar sus esfuerzos en hacer nuevo productos.

'El país viene dando prioridad a este tema, pero vamos a un ritmo más lento en políticas de gobierno en cuanto a la alianza de universidad e industria, pero la universidades se están empezando a pellizcar. El país ya está identificando ahí un reto grande. En una economía más abierta, la única forma de competir es por la vía de la innovación', dijo Saúl Pineda, director del centro de competitividad de la Universidad del Rosario.

'Cada vez hay más interés, en la medida en que las universidades han entendido que hay que incidir más en la dinámica de generación de productos, en esa medida los empresarios se han interesado más en los procesos investigativos de las instituciones. El sector privado debe entender que se puede invertir en esos procesos', añadió.

El experto agregó que las escuelas deben aprender a generar incentivos no solo al número de publicaciones que hacen en revistas sino en el registro de nuevos productos, como en Chile.

Crisis afecta innovación en España
Los sistemas nacionales de innovación de los países europeos se ha visto afectados por la falta de recursos en el marco de la crisis y el mejor ejemplo puede ser España. El año pasado el gasto español en Investigación y Desarrollo (I&D) creció apenas 0,041% en 2011, es decir, casi nada. Esto se explica al saber que el 50% de la inversión en esto viene de fondos públicos. Esto lo pone en una situación de desventaja comparado con sus vecinos, los cuales además tienen mejores perspectivas económicas. Alemania por ejemplo anunció que aumentará 5% en sus presupuesto para I&D, mientras que Francia dijo que dedicará cerca de 35.000 millones de euros para actividades similares.

Las opiniones

José Luis Salazar
Director de Nuevas Creaciones de la Superintendencia de Industria y Comercio
“En la medida en que la economía colombiana se fortalezca, crezca el empleo y la inversión extranjera seguramente vamos a ver un avance significativo en la presentación de patentes”

Saúl Pineda
director del centro de competitividad de la Universidad del Rosario
“El país viene dando prioridad a este tema, pero vamos a un ritmo más lento en políticas de gobierno en cuanto a la alianza de las universidades y la industria”.