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Es innnegable la necesidad que tiene el Gobierno Nacional de recaudar recursos para poder equilibrar su balance económico. Los recientes anuncios del ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, propusieron ampliar la población que paga impuesto sobre el patrimonio.
Sin embargo, la respuesta de otros países frente al recaudo ha sido establecer tasas de IVA (impuesto sobre el valor agregado) elevadas. De la Región, resaltan Brasil (25%), Uruguay (22%) y Argentina (21%), de los cuales solamente el último tiene un impuesto sobre el patrimonio.
Colombia está entre los pocos países que tiene este impuesto y cuenta con la segunda tasa de IVA más baja, después de Perú. Esta situación es muy diferente a la que existe en Brasil, cuyo IVA está entre los primeros tres del mundo y donde no existe un tributo sobre el patrimonio.
Marcel Hofstetter, director de finanzas y comercio internacional de la Universidad de la Salle, explicó que “en el caso de Brasil, el Gobierno puede estar financiando sus gastos a través de su tasa elevada del IVA o a través de su impuesto sobre la renta. El IVA es de fácil recaudo y por esto muchos gobiernos lo utilizan mucho. Sin embargo, tiende a ser regresivo porque no ayuda a redistribuir la riqueza”.
Las mismas circunstancias pueden aplicar para los demás países de la Región que presentan una tasa elevada de IVA. Aunque Argentina y Uruguay, ( ambos con tasas altas de 22% y 21%, respectivamente), sí han optado por tener un impuesto sobre el patrimonio, la mayoría de países latinoamericanos, como por ejemplo, Chile (que figura con un IVA de 19%) no han impuesto un tributo sobre el patrimonio, al igual que el país carioca.
En México la tasa del IVA está en 16% y tampoco existe este tipo de carga tributaria y en Perú, donde la tasa del IVA es más baja que la de los demás países de la Región (10%), tampoco hay una.
Gonzalo Palau, docente de economía de la Universidad del Rosario, mencionó el caso de España el año pasado en que dentro del plan de ajuste del gobierno, el presidente Mariano Rajoy incrementó la tasa del IVA. Este impuesto quedo fijado en 21% como recomendación del Fondo Monetario Internacional (FMI) y de la Unión Europea (UE).
“En casos como este, debido a que el IVA afecta al grueso de la población, el Gobierno debe garantizar que lo que se recaude beneficiará al gasto social si quiere ser prudente”.
El caso colombiano
Gustavo Cote, exdirector de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales de Colombia (Dian), explicó las dificultades que implicaría esta nueva medida en el país. “Las personas con un patrimonio de $750 millones no son necesariamente lo suficientemente pudientes para someterse a este tributo”. El experto agregó que el descontento general se debe a que muchas personas que no tienen una capacidad económica grande aparecen con un patrimonio mayor (entre $700 millones y $800 millones) por efecto de que el avalúo catastral ha aumentado significativamente.
Cote también explicó que existen otras opciones a disposición del Gobierno para ampliar los recursos fiscales, que además serán más duraderas para el equilibrio financiero del país.
“Para que el Presidente pueda tratar de resolver los compromisos que ha prometido, como los temas de educación, posconflicto e inequidad social, existen tres medidas alternas que se pueden implementar que consultan criterios de justicia e inequidad”.
En primer lugar, el exdirector de la Dian insistió en que se debe eliminar el tratamiento preferencial en el IVA y en el impuesto de renta que se ha venido concediendo a ciertas empresas y sectores.
El experto también afirmó que “hay que exigirle a la Dian una mayor efectividad en la fiscalización, ya que la evasión tributaria es altísima en el país”.
Por último, mencionó que se debe simplificar el sistema tributario. Por ejemplo, recordó que en la última reforma tributaria (en 2012) más de 700.000 colombianos tuvieron que declarar renta. “Este fue un desgaste administrativo, ya que se estudiaron declaraciones de personas que no representaban mayor recaudación tributaria”.
El impuesto sobre el patrimonio global de Piketty
El reconocido economista francés Thomas Piketty, en su libro “El capital en el siglo XXI”, propuso que cobrar más impuestos a las grandes fortunas permite luchar contra la alta concentración de las riquezas e implica una transparencia bancaria que hoy hace falta.
Piketty abogó por imponer un impuesto al patrimonio a todos aquellos que ganen a partir de US$500.000 para corregir la desigualdad social. El profesor parisino sugirió una tasa global de 80% de impuestos al ingreso para quien gane más de dicha cantidad y un impuesto global al patrimonio de 5% a 10% anual a quienes posean más de US$1.000 millones.
La Opinión
Gustavo Cote
Exdirector de la Dian
“Las personas con un patrimonio de $750.000.000 no son necesariamente muy pudientes para someterse a pagar el impuesto al patrimonio”.
Marcel Hofstetter
Director de finanzas de la Universidad de La Salle
“El IVA es de fácil recaudo y por esto es muy atractivo para los gobiernos. Sin embargo, tiende a ser un impuesto regresivo, que no contribuye a redistribuir la riqueza”.
Gonzalo Palau
Profesor de economía de universidad del Rosario
“Con los aumentos del IVAse trata de un impuestoque afecta al grueso de la población; los gobiernos deben garantizar que la recaudación será destinada al gasto social”.
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