Lina María Guevara Benavides
Los predios escogidos están ubicados en la zona de influencia de la Represa de la Fe, que abastece de agua a 30% de la población del Valle de Urabá.
La compañía involucró en la iniciativa a comunidades campesinas de los municipios aledaños, una región que ha sido afectada por la violencia. Durante la actividad, los campesinos participaron en la mano de obra y serán los encargados del cuidado de las siembras durante los siguientes dos años.
Según Mauricio Arango, gerente en la zona Antioquia, “se plantaron 750 árboles en el Parque Los Salados y 1.601 en El Santuario, completando más de 2.300 siembras”.
Además, los predios seleccionados pertenecen a zonas de conservación, esto quiere decir que hay mayores garantías para que los árboles no sean talados y, por el contrario, puedan destinarse a la captura de CO2.
La actividad hace parte de la concientización de Chevrolet frente a la contaminación producida por la emisión de gases de los carros. Razón por la que se comprometió a sembrar un árbol por cada vehículo vendido en Antioquia.
