.
EDITORIAL

Líos del agro no solo es reforma de tierras

sábado, 13 de agosto de 2016
La República Más
  • Agregue a sus temas de interés

La discusión mundial sobre agricultura se fundamenta en variables que aquí ni se consideran, comenzando porque el tema de propiedad territorial es de segundo plano.

Nuestro país siempre ha defendido su vocación agrícola, aunque se debe reconocer un sobredimensionamiento conceptual que va más allá de factores como las ventajas comparativas naturales asociadas a la bondad “divina” del clima y la topografía, que en el mundo global en el que la investigación y la tecnología son determinantes para alcanzar una mayor competitividad, dejan de ser relevantes.

La discusión actual sobre la agricultura en el mundo se fundamenta en variables que aquí ni siquiera se consideran, comenzando porque el tema mismo de la propiedad territorial ha pasado a un segundo plano, pero que en Colombia no se ha podido superar por el peso político que todavía se le otorga como si -por ejemplo- el mayor bienestar o progreso de la población campesina estuvieran ligados meramente a tener un título sin importar las condiciones en que se desarrolla el proceso productivo, y la necesaria ocupación territorial por parte del Estado que se reduce equivocadamente al otorgamiento de subsidios que terminan yendo a quienes menos lo necesitan o tienen una mayor capacidad para influenciar, o hacer lobby ante las instancias oficiales. 

Los estudios y análisis sobre el agro están ahí e incluso en los últimos años se ha hecho un esfuerzo importante en este sentido, tanto conceptual como estadístico. La Misión Rural y el Censo Agropecuario son ejercicios serios que merecen incluirse en la agenda permanente de la acción del Estado. Sin embargo, ello no es suficiente, sino que se requiere de un liderazgo en la acción pública con una visión de mediano y largo aliento, lo cual infortunadamente no se ha tenido, pues la política sectorial prioriza la atención de problemas ligados a asuntos clientelistas, de orden público, mediáticos y reclamos de asociaciones gremiales, propios de otras dependencias oficiales, pues hay una creencia equivocadamente en el sentido que la consigna de apagar incendios mejora las condiciones del agro.

Pero no solo es una idea estructual la que debe acompañar a este importante sector y que debe estar involucrada en la estrategia macro de desarrollo económico y social, sino que hay consideraciones de corto plazo fundamentales que deben hacer parte del manejo de un renglón tan importante en la vida de los ciudadanos, sin consideración acerca de su localización o nivel socioeconómico y el mejor ejemplo en este sentido lo está viviendo el país con la desbordada tasa de inflación, la más alta de los últimos 15 años y que tiene en los alimentos su principal factor de perturbación, con un aumento de precios de más de 15% en un año.

Como consecuencia del fenómeno de El Niño, los mismos agricultores expresan que se ha dado un cambio en los patrones de las cosechas y en particular en el ciclo productivo, retrasándolo en la mayoría de los cultivos con su evidente impacto en la oferta y por ende en la demanda, lo que no se sabe es si esto es permanente o es temporal.

Conozca los beneficios exclusivos para
nuestros suscriptores

ACCEDA YA SUSCRÍBASE YA

MÁS DE EDITORIAL

Editorial 28/03/2024 El cargo por confiabilidad debe funcionar

Los colombianos pagan un sobrecosto en su factura de energía destinado a costear las eventuales crisis, como la que se vaticina, pero las generadoras no hablan del asunto

Editorial 27/03/2024 Jubilaciones: la crisis actual que ve BlackRock

El director ejecutivo de BlackRock, Larry Fink, en su carta anual habla de jubilaciones y de la necesidad de repensar todo el sistema: “Nadie debería trabajar más tiempo del que quisiera”

Editorial 26/03/2024 La peligrosa anarquía en el sector eléctrico

Los estragos del Fenómeno de El Niño en los embalses es el chivo expiatorio para tapar el desgreño y la pugnacidad en que está inmerso el sector eléctrico, en donde nadie manda