Los mejores campos de golf por cada región del país para deleitarse

Pese a que la cultura hacia la práctica de este deporte no tiene tanto auge como la de otros deportes de conjunto en el país, el golf cuenta con un selecto público que disfruta de todos los beneficios que trae consigo su práctica.

Los paisajes, el contacto con la naturaleza, el servicio de lujo y la buena compañía son algunas de las ventajas que disfrutan todos los seguidores de este deporte, quienes generalmente lo hacen en algunos de los mejores clubes con los que hoy cuenta el país.

Aunque las condiciones climáticas son claves para el desarrollo del juego, en Colombia se pueden encontrar campos en diferentes regiones, sin importar las altas o bajas temperaturas a las que se vean expuestos los campos.

LR hizo un recuento con tres de los mejores escenarios con los que cuentan seis regiones del país, cada uno de ellos con características similares por el tipo de instalaciones en las que fueron construidos (ver gráfico).

Se trata de clubes campestres en los que la gente no solo puede ir a pasar una mañana recorriendo los campos, sino también puede disfrutar de todos los exclusivos servicios que ofrecen en su interior como piscina, restaurantes, zonas húmedas, canchas de tenis, squash, fútbol e incluso hospedajes cinco estrellas para pasar una o más noches allí.

La mayoría de ellos están ubicados en las capitales más importantes de cada zona consultada, sin embargo, también se pueden encontrar posibilidades en municipios ubicados a sus afueras.

Si bien son muchos los factores que pueden determinar la calidad de estos campos, jugadores y expertos resaltan que algunos de los puntos a tener en cuenta son: la calidad del césped, la tecnología de protección del mismo y hasta su tradición.

En el caso de campos como el de TPC del Karibana de Cartagena o el David Gutiérrez del Club Los Lagartos de Bogotá otra característica que destaca es la persona que se encargó de la arquitectura y el diseño de los terrenos, pues este es un factor en el que únicamente los especialistas o deportistas con experiencia pueden aportar para mejorar el estatus de un campo.

El primero de ellos fue diseñado por Jack Nicklaus, considerado como uno de los mejores golfistas de la historia, teniendo en cuenta que en su palmarés registró más de 20 torneos profesionales ganados. El David Gutiérrez por su parte fue concebido por el estadounidense Scott Miller, experto en el tema con más de 30 años de experiencia y quien además ha diseñado el campo de Payandé en las cercanías de Bogotá.

Aunque la mayoría de los golfistas profesionales y aficionados que practican este deporte son socios de estos clubes, cualquier persona podría hacerlo en caso de no poder asociarse. Para ello, el deportista debe ser presentado por un socio y pagar su estadía y la ronda de golf, que en promedio puede valer entre $120.000 y hasta $400.000, según día y hora.

Además, en 90% de los casos se debe jugar con un caddie, servicio que tiene un costo superior a los $40.000 la hora y contar con los palos de golf necesarios. Actualmente, el precio de un talego de golf de 14 palos oscila entre $10 millones y hasta $20 millones.

Ideas y programas incluyentes para su práctica

De acuerdo con Camilo Sánchez Collins, presidente de la Federación Colombiana de Golf, “hoy este deporte está pasando por un buen momento, seguimos promoviendo y fomentando su práctica, sobre todo, con los niños. Con ellos, se está haciendo un enfoque especial en cada club asociado con clases personalizadas en cursos vacacionales y de fines de semana”.

Además, también recalcó que en el campo del Centro de Alto Rendimiento, el único público del país, se ofrecen clases a niños y jóvenes de toda la ciudad.