Los principales líderes de la Unión Europea se ausentan de la cumbre latinoamericana

Los líderes europeos, entre ellos el canciller alemán Friedrich Merz y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, no asistirán a la cumbre de la UE con los estados de América Latina y el Caribe, en parte por temor a enfadar al presidente estadounidense Donald Trump.

La cumbre Unión Europea-Celac está siendo objeto de escrutinio en Europa, ya que Estados Unidos señala a países como Colombia —que acoge la cumbre— y Venezuela por acusaciones de narcotráfico, según fuentes familiarizadas con el asunto.

Según fuentes cercanas a la organización, solo cinco líderes europeos y tres líderes latinoamericanos y caribeños han confirmado su asistencia a la reunión. El encuentro tendrá lugar en Santa Marta, Colombia, los días 9 y 10 de noviembre.

La baja asistencia se debe en parte a la postura cada vez más agresiva de Washington en la región, según indicaron fuentes anónimas. Trump ha intensificado sus amenazas militares contra Venezuela y recientemente sancionó al presidente colombiano Gustavo Petro.

Merz no tiene previsto asistir debido a “la escasa participación de otros jefes de Estado y de Gobierno”, según indicó su portavoz, Stefan Kornelius, en un comunicado enviado por correo electrónico.

Esa es también la razón por la que Von der Leyen no asistirá a la reunión, según Paula Pinho, portavoz principal de la Comisión, el brazo ejecutivo de la UE.

“En vista de la actual agenda política europea y la escasa participación de otros jefes de Estado y de Gobierno, la presidenta von der Leyen no asistirá a la cumbre”, dijo Pinho en un comunicado enviado por correo electrónico, señalando que la alta diplomática de la UE, Kaja Kallas, asistirá en lugar de von der Leyen.

En conjunto, la UE y la Celac representan a 60 países y 21% del PIB mundial. La cumbre tiene como objetivo debatir temas como el fortalecimiento de los lazos comerciales y la lucha contra el crimen organizado.

Los países de América Latina y el Caribe también quieren aprovechar la cumbre para abordar específicamente las recientes medidas de Trump en la región, incluyendo la concentración de buques estadounidenses cerca de Venezuela, las sanciones y las amenazas de anexar el Canal de Panamá, según fuentes cercanas a la planificación. Asimismo, buscan que la UE respalde a un candidato latinoamericano o caribeño para dirigir próximamente las Naciones Unidas.

Esta cumbre no es la primera en América Latina que se topa con problemas políticos. El lunes, la República Dominicana anunció que pospondría una reunión clave de líderes de todo el continente americano hasta el próximo año, debido a que los ataques militares estadounidenses contra embarcaciones en la zona intensifican las tensiones con Venezuela y dividen a la región.

Por otra parte, la UE espera finalizar antes de que termine el año un acuerdo comercial largamente postergado con el Mercosur, grupo de naciones sudamericanas.